Locura Monumental. En un partido caliente, en el que se pegó mucho más de lo que se jugó, River consiguió un valiosísimo 1-0 ante Boca, que lo invita a soñar con el pase a los cuartos de final de la Copa Libertadores.
Al igual que ocurrió el domingo por el torneo local, el encuentro se definió en una jugada aislada. El Millonario fue el que siempre tuvo la iniciativa, pero carecía de ideas para lastimar en los metros. El Xeneieze, apostó todas sus fichas a la contra y no supo aprovecharlas.
Y, en una noche repleta de polémicas (patadas, codazos y la expulsión de Teo), la jugada clave también dará que hablar: Marín tomó a Pity Martínez en el área, Delfino dio penal y Carlos Sánchez lo canjeó por gol.
La revancha será el próximo jueves en la Bombonera. River tiene una ventaja que es mínima, aunque el no haber recibido goles de local puede valer mucho en una semana.