El Real Madrid no necesita brillar para ganar. A esta altura ya lo hace por inercia, por costumbre, a pura hegemonía. Con el 2-1 como visitante al Málaga, el equipo de Ancelotti llegó a su récord de victorias consecutivas. Nada menos que 16 triunfos en fila. Por todo esto sigue firme como líder en La Liga y también en su grupo de la Champions League. Está hecho un Ciclón, y pronto también irá por el Mundial de Clubes. Los goles del Madrid los marcaron Benzema y Bale, mientras que Roque Santa Cruz descontó en el adicional.
Los de Ancelotti traían hasta la fecha un promedio mayor a tres goles por partido. Si bien el entrenador decidió poner lo mejor para la ocasión, el equipo no aceleró como si se tratara de un choque decisivo. Cristiano sí pisó el acelerador en una jugada por la izquierda en la que mareó a su marcador para sacar un centro por abajo. Karin Benzema ganó en el área y puso el 1-0. Luego se observó la falta del francés a Welington.
Pero el Madrid no logró los tres puntos por el error arbitral en el 1-0. Hubo por lo menos dos penales que no le dieron por faltas Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo. El portugués, que sumaba 20 goles en sus 11 partidos de La Liga, dispuso de tres ocasiones. No convirtió ninguna. Pero sí volvió a participar con un cabezazo como asistidor en el contraataque que finalizó con el 2-0 de Bale. Luego llegaría el tanto de Santa Cruz. Ya era historia. El equipo de Ancelotti a esa altura estaba metido en el libro de los récords del Madrid.