El "cambio profundo" en la Confederación Argentina recién ha comenzado y tenemos un largo camino por recorrer para modificar el rumbo del básquet nacional. Todos los estamentos debemos unirnos para crear una estructura sólida en base al profesionalismo y la honestidad para trabajar.
Hace algunos días, quienes integramos la Selección Argentina de básquet realizamos un pedido público de “cambio profundo” en la Confederación Argentina.
El mensaje fue simple: queremos una dirigencia honesta, transparente y profesional, después de haber convivido con irregularidades en la CABB durante años y de ver cómo el básquet nacional crecía en lo deportivo, pero sin un acompañamiento institucional acorde.
El cambio está empezando y deberá consolidarse con el acompañamiento de todos los estamentos. La participación del Estado, a través de la Secretaría de Deportes de la Nación, fue y será muy importante para llevar esta acción adelante, y modificar el rumbo del básquet argentino. La crisis en la que se encuentra la CABB nos movilizó a buscar opciones para mejorar y comenzar a transitar un nuevo camino.
Recién se dio el primer paso, queda mucho por recorrer y será responsabilidad de todos corregir errores y disponernos a construir sobre nuevos pilares.
Estamos comprometidos con nuestro deporte. Nadie nos pidió jugar este partido. Lo hacemos porque sentimos que es nuestra obligación dejar un legado a las generaciones venideras.
Creemos que puede haber un futuro mejor para los 200.000 federados que tiene el básquet nacional y todos debemos acompañar este nuevo proceso.
Como hace 30 años, quien fuera el creador de la Liga Nacional, León Najnudel, pensó en el bien común por sobre cualquier interés personal, hoy nosotros, algunos ya en el último tramo de nuestra carrera, queremos dejar algo más que un logro deportivo.
Confiamos en que puede lograrse y para ello estamos a disposición para trabajar en lo que sea necesario.
Selección Argentina de Básquet - Asociación de Jugadores