Novak Djokovic es el número uno del mundo y ya ganó más de 50 títulos en su carrera. Pero hay un torneo que aún no pudo conquistar y se ha convertido en su gran objetivo: Roland Garros. Hoy, de cara al torneo más importante sobre polvo de ladrillo, el serbio pasó una prueba de carácter y conquistó el Masters 1000 de Montecarlo, uno de los campeonatos más prestigiosos sobre esa superficie.
En la final, que se jugó en dos partes porque la lluvia obligó a parar cuando se disputaba el segundo set, el serbio se impuso en un parejo partido ante el checo Tomas Berdyc h por 7-5, 4-6 y 6-3. Así conquistó el Masters 1000 número 23 de su carrera y alcanzó la marca de Roger Federer, que suma la misma cantidad. Esta tabla la sigue liderando Rafael Nadal, con 27 títulos.
El serbio luchó para llevarse el primer set y logró mantener el nivel en el comienzo del segundo, pero la lluvia fue un traspié. Cuando se reanudó el partido, Berdych mostró lo mejor de su juego para llevar la definición al último parcial. Allí, como cada vez que se enfrenta a la presión, Djokovic se llevó un triunfo inapelable.