Tímido y poco acostumbrado a los flashes, el flamante refuerzo de Racing no duda a la hora de declarar. Podría sacarse de encima el problema y tirar la pelota afuera como un férreo defensor del Ascenso. Pero no. Detrás de la frase rimbombante enseguida hay una explicación franca. "Me llamó Almirón para ir a Independiente, es cierto. Le agradecí la comunicación, pero la realidad es que no me interesó ir a Independiente. En su momento no me llamó la atención ir ahí. Soy sincero", jura el ex delantero de Banfield, quien hace seis meses fue el jugador fetiche del Rojo, club que no consiguió seducirlo: "El presidente de Banfield me preguntó qué quería hacer y le dije que quedarme. Pero ahora me llamó Cocca, ¡cómo le voy a decir que no al último campeón! Es un club mucho más ordenado. Me dieron ganas de venir".
-Sos muy sincero...
-Sí, pero no es vender humo como muchos dicen. A mí siempre me gustó Racing, desde que lo vi jugar la Promoción contra Belgrano en 2008, quise estar en Racing. Me acuerdo de ver ese partido por la tele y la cancha estaba llena. No había puteadas, era todo aliento. Creo que por eso se quedaron en Primera.
-¿Cómo veías desde afuera a Racing?
-A mí me tocó debutar en Boca cuando Racing peleaba ahí abajo y la cancha explotaba. Eso no es fácil de conseguir en el fútbol argentino y te motiva, te das más ganas de jugar. Hasta en el partido contra nosotros, en la Bombonera, que hice mi primer gol en Primera que la gente alentaba. Seguramente que alguna puteada me habré llevado, ja. Son las vueltas de la vida, el destino.
-¿Esperabas mucho otra oportunidad en un equipo grande?
- Cada vez que uno llegó a un club lo hizo con ganas de jugar bien y poder progresar. Ahora estoy en una institución muy grande y tengo que disfrutarlo. A los 28 años es una muy buena oportunidad.
-¿Cuánto te llamó la atención llegar a un vestuario que tiene a Milito?
-Mucho. Me ha tocado jugar con muy buenos jugadores y estar con Diego me pone contento. Sabemos de su clase. Tuvo la suerte de ganar la Champions, hacer goles en una final. Es un privilegio tenerlo, se nota su calidad en cada movimiento. El otro día hizo un gol de pecho.
-¿Estás más maduro?
-Claro. Ya han pasado siete años desde mi debut y cada paso te deja algo, te enseña. Hoy me siento más completo. Antes jugada solamente de punta. Almeyda me hizo jugar bien de extremo derecho y de volante también me ha probado. Es bueno para un entrenador que sus jugadores tengan más variantes.
-¿Almeyda fue el técnico que más te marcó?
-Sí, seguramente. Matías fue un entrenador muy bueno para mí. Creo que él consiguió explotarme al máximo. Cada vez que me toca hacer una nota le agradezco siempre porque aparte de ser un excelente entrenador también es una gran persona. Quedan pocos como él.
-¿Te dio el plus que te faltaba en tu carrera?
-Creo que sí. El me motivó mucho. Cuando llegué a Banfield yo prácticamente no jugaba y Almeyda me puso. Me decía "vos tenés que jugar", "cómo no vas a hacerlo", "tenés muchas condiciones", "quiero que juegues así y así". En los entrenamientos me fue saliendo todo lo que me pedía y pude explotar al máximo de mi nivel.
-¿Te faltaba la dosis de confianza antes de Banfield?
-Lo del futbolista pasa mucho por la cabeza. El rendimiento pasa por ahí y tener gente alrededor que te aconseje bien, te hable bien, que te motive... Y eso me pasó con Matías.
-¿Y Cocca cómo es?
-También entrena muy bien y tiene un cuerpo técnico que trabaja. Particularmente me habla mucho y a uno eso lo deja tranquilo. Es joven y los técnicos jóvenes tienen otra mentalidad, otra propuesta. Eso le hace muy bien al fútbol.
-¿Llegaste sabiendo que vas a ser más volante que delantero?
-Sí, cuando Diego me llamó me lo explicó. Por el juego que tiene él y lo que me planteó lo supe desde un principio. Y no tengo problemas de hacerlo bien pegado a la línea.
-¿Tenés muchos amigos hinchas de Racing?
-Sí, algunos y también hay varios en mi pueblo (Villa Elisa, Entre Ríos). El otro día contra Sarmiento, en mi debut en el Cilindro, invité a varios y no lo podían creer. Fue un bombazo para todos, también para mi viejo que es muy futbolero y siempre me aconseja desde chico.
-Igual no debutaste muy joven en Primera...
-Recién a los 19 años llegué a Boca y hasta esa edad siempre trabajé. A los 15 dejé el colegio y laburé en un aserradero, de albañil y también en una cooperativa.
-¿Y ya eras punta?
-Sí, siempre rápido y por afuera desde que jugaba los torneos de Colón, en mi provincia. Recién ahora considero que ya puedo decir que juego en varias posiciones.