A última hora del domingo, Tigre comunicó la noticia de que Néstor Gorosito, el entrenador que consiguió el título de la Copa Superliga con el Matador que ya había perdido la categoría, dejó su cargo de común acuerdo, tras culminar su participación en la Copa Libertadores y a un puñado de días de volver a jugar por la Primera Nacional en busca del regreso a Primera. Juan Carlos Blengio asumirá de manera interina.
De esta manera, Pipo le puso punto final a su segundo ciclo en Victoria. El 13 de febrero de 2019 se hizo cargo de un equipo muy comprometido en el sótano de la tabla y, si bien no pudo evitar el descenso, logró cosechar grandes resultados en el último sprint de campeonato y alzar la Copa de la Superliga, bordándole al escudo de la institución la primera estrella de su historia.
Ya en la Primera Nacional sufrió varias bajas, del calibre de Walter Montillo, Federico González o Lucas Janson, y jamás pudo mantener la regularidad necesaria para pelear en el lote de arriba. Pese a estar en más de una ocasión en la cuerda floja y en el centro de las críticas de los hinchas, su estadía en Tigre se prolongó por la participación del club en la Copa Libertadores.
Sin embargo, en el torneo continental nada fue lo que se esperaba. Finalizó último de su grupo, con apenas un punto, producto de un empate con Bolívar de local, y perdió los cinco restantes, con solo tres goles a favor y 17 en contra. El 5-0 con Palmeiras de la semana pasada fue la gota que rebalsó el vaso y produjo el adiós de Gorosito, que dio un paso al costado luego de 43 partidos, 19 triunfos, ocho igualdades, 16 caídas y un título.