El equipo argentino se impuso por 19-25, 28-26, 25-20, 23-25 y 15-11. Y se dio un gustazo enorme contra una de las grandes potencias del voley.
Para Argentina termina siendo una buena participación en el Mundial: terminó entre los doce primeros y con dos triunfos en la segunda fase (sobre Italia y hoy con Estados Unidos).
Los dirigidos por Julio Velasco ya no tenían chances de clasificarse a la fase final, pero jugaron a cara de perro y disputaron cada pelota con enorme amor propio y concentración.
Estados Unidos sufrió la derrota como una gran furstración: se quedó afuera de los seis equipos que lucharán por el título (Francia, Polonia, Irán, Rusia, Brasil y Alemania o Canadá).