River vivió una noche histórica, como las que tiene acostumbrados a todos desde que inició el ciclo de Marcelo Gallardo al frente del club. Con Enzo Pérez, con una molestia en su isquiotibial, como arquero y con los únicos diez jugadores que le quedaban disponibles, después de sufrir veinte contagios de coronavirus en el plantel, le ganó a Independiente Santa Fe por 2-1 y es líder absoluto del Grupo D de la Copa Libertadores. El Millonario se ilusiona con recuperar algunos soldados para la última fecha y poder presentar un equipo más "normal".
Los tiempos son muy justos, pero los primeros 15 jugadores diagnosticados con COVID-19 positivos el último sábado previo al Superclásico cumplen el aislamiento reglamentario de 10 días el próximo lunes. Así que podrían estar en el Monumental para recibir a Fluminense: Franco Armani, Enrique Bologna, Germán Lux, Franco Petrolli, Paulo Díaz, Robert Rojas, Bruno Zuculini, Tomás Castro Ponce, Santiago Simón, Nicolás de la Cruz, Agustín Palavecino, Rafael Santos Borré, Matías Suárez, Federico Girotti y Benjamín Rollheiser.
Los que hayan cursado la enfermedad asintomáticos o con síntomas leves y se sientan bien van a poder estar para enfrentar al Flu en la última fecha de la fase de Grupos. Cabe destacar dos cuestiones: el club deberá realizar ese mismo lunes toda la batería de chequeos médicos que se realizan luego de tener coronavirus para descartar cualquier secuela y los jugadores se someterán al testeo PCR habitual previo a un partido, como indica el protocolo, pero no es necesario que el resultado sea negativo. Los jugadores estarán habilitados debido a que se considera que pueden tener una baja carga viral en su cuerpo, pero ya no contagiar.
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