Newell's Old Boys presentó en Rosario al trío de resonantes incorporaciones que reforzarán al conjunto comandado por Gustavo Raggio, que anoche comenzó con el pie izquierdo la temporada, perdiendo 3-1 con Talleres y despidiéndose antes de lo imaginado de la Copa Argentina. Sin embargo, los desembarcos de Leandro Fernández, Oscar Ustari y fundamentalmente de Ignacio Scocco volvieron a entusiasmar a cada uno de los simpatizantes del Rojinegro.
El delantero procedente del Sunderland llegó desde Londres y rápidamente enfiló hacia el estadio Marcelo Bielsa, donde cerca de 10 mil personas le retribuyeron su esfuerzo para regresar a la institución con muestras de cariño, cientos de fotos y muchos autógrafos. Al mismo tiempo, recibió la camiseta 32 que le arrimó el Presidente del club, Guillermo Lorente, y escuchó la ovación del público.
"Más allá de que se sufrió, se hizo duro, valoro el esfuerzo de los dirigentes de ir a Inglaterra y le mostraron interés real al Sunderland. Fue muy importante lo que hicieron", manifestó el delantero en la conferencia de prensa posterior, donde se hicieron presentes cientos de medios nacionales. Luego de pasos frustrantes por tierras británicas y anteriormente en Internacional de Porto Alegre, "Nacho" recuperó la fe.
Scocco, que también estuvo en carpeta de prioridades de River pero nunca dudó en regresar al club que lo tiene en la galería de los máximos ídolos contemporáneos, explicó las razones de su salida y las causas que lo llevaron a presionar para retornar. "Cuando uno está lejos extraña y mucho, esta vez más que nunca. Ese error de pensar que estaba listo para irme otra vez me llevó a defraudar a mucha gente, del Inter, de Sunderland, pero si bien estaba allá mi cabeza estaba acá, miraba por televisión los goles y me volvía loco", destacó el hombre que ganó dos campeonatos en el equipo
Por último, también comentó que "hice todo para volver. Cuando miré el primer partido de Newell's y no me vi adentro me sentí muy mal, había veces que tenía que dejar de mirar, por eso estoy acá, este es mi lugar. Me di cuenta de que sin Newell's no puedo estar, que acá soy feliz. Mis últimos años quiero que sean acá, el corazón manda y me trajo de vuelta".
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