Pero Silver manejó la posibilidad de que los partidos pudieran llevarse a cabo frente a multitudes limitadas. "No es lo que quisiéramos, pero puede ser nuestra realidad por un tiempo", aseguró. Además, agregó: "Puede ser que haya un punto en el que podamos traer a una parte de nuestros aficionados y que se sienten con distancia de cada tercer asiento".
"Suponiendo que no llegue una vacuna en el corto plazo, hay cosas que podemos hacer en nuestros campos de juego en los que quizá no podamos tener 19.000 personas, pero sí 5.000 u 8.000. Quizá haya protocolos que lo permitan".
Por el momento ni la NBA ni ninguna otra liga de deporte profesional sabe en qué momento pueda volver a llenar sus estadios, pero todas están tratando de encontrar la clave para lograrlo. Aunque muchos jugadores hayan dicho que consideran necesario el bullicio de los asistentes mientras juegan, la razón principal es económica.