No es la primera vez que da detalles sobre su adicción a las drogas pero cada vez que lo repite, Claudio "El Turco" García lo hace con la intención de dejarle un mensaje de esperanza a personas que pueden estar sufriendo la misma enfermedad que él padeció y logró dejar atrás gracias al apoyo de su familia y principalmente de su esposa Mariela.
Esta vez como invitado de Podemos Hablar y en medio del éxito de MasterChef, el ex futbolista marcó su participación en el reality como un antes y un después en su vida: "Yo no soy un tipo del espectáculo y cuando me hicieron la propuesta para participar del programa, tenía mucho temor. Mi señora cuando no se hace lo del Bailando, me dice andá y me convenció. Fui con el temor de no saber prender una hornalla y hoy soy un agradecido por lo que pasa en la calle. La gente me vuelve a reconocer, otro público, y con la cocina. Hace un mes y medio que me cambió la vida y estoy feliz y agradecido", describió con emoción el ex futbolista de Racing entre otros clubes.
Pero más allá de este presente gracias al suceso que generó el programa de cocina, el Turco tiene una fecha tatuada en su mano que realmente cambió su vida cuando el 11 de febrero de 2008 logró vencer su adicción y recordó: "Yo empecé con las drogas cuando dejé el fútbol. Yo pensaba que iba a estar tranquilo, viajar. No sabía qué hacer y busqué una escapatoria pero es una mentira. Siempre digo que la droga es un impermeable, te tapa la lluvia pero se te ve la ropa. Cuando dejé el fútbol me encontré con un año espectacular y después qué. Siempre lo mismo, no levantarte temprano, no hacer nada y un día agarré el camino equivocado".
Y siguió su relato: "La que se bancó lo peor fue Mariela, mi señora. Me iba a buscar a las villas y no la violaron de suerte. Yo estaba ahí adentro y ella sabía y me iba a buscar. Yo digo que con las drogas perdí la dignidad y hoy soy un agradecido de la vida, es como volver a nacer".
<b>¿Cómo superó su adicción el Turco García?</b>
Una de las cuestiones más complicadas con las adicciones es poder ese primer paso tan difícil de reconocerse uno mismo como un enfermo para empezar a combatir el problema y el Turco García encontró una fórmula cruda pero efectiva: "Un día estaba en el departamento y me filmé. Cuando me vi, dije '¿este soy yo?', por eso el libro que salió hace dos años. Rebotaba por las paredes, un desastre, eso ya me dio una reacción. Después me fui a Venado Tuerto".
Una de las anécdotas más fuertes del hombre nacido hace 57 años en Villa Fiorito se remonta a la muerte de su padre en plena adicción: "Cuando se murió mi viejo le puse droga en el pecho y la tomé. Fue como puteándolo porque él me había dejado, porque él no se pudo despedir de mí porque no me quería ver mal. Entonces pasaba por donde vivía yo, le preguntaba al portero y seguía. Eso no me lo podía perdonar pero hoy sí gracias a la terapia lo fui superando. Yo tendría que estar muerto hace 15 años. En el 2007 estaba para el cementerio y hoy estoy feliz". Tremenda historia del ídolo de Racing, tan cruda como real.