En el arranque de la Q1, Ferrari continuó con el buen ritmo en ambas maquinas. Primero Kimi Raikkonen y luego Sebastian Vettel marcando tiempos inalcanzables hasta para los Mercedes.
Mientras tanto en el box de Red Bull continuaban trabajando en el cambio de la unidad de potencia del RB14 de Daniel Ricciardo, quien salió sobre el final y le alcanzó con lo justo para calentar y dar solo una vuelta rápida a todo o nada. El australiano salió a comerse el asfalto chino y hacer valer el trabajo a destajo que hizo su equipo para poder ponerlo en pista en la clasificación, y fue fructífera su agónica vuelta, puesto que logró pasar a la Q2 para felicidad de sus mecánicos.
Quedaban eliminados los Williams de Sergey Sirotkin y Lance Stroll, los Sauber de Charles Leclerc y Marcus Ericsson y el Toro Rosso del francés Pierre Gasly.
La Q2 parecía todo de Ferrari con Raikkonen arriba de Vettel, pero parece que Mercedes se había guardado todo para el final con las superblandas. Hamilton voló quedando por encima del tiempo de Bottas y detrás las Ferrari.
Magnussen, Ocon, Alonso, Vandoorne y Hartley se quedaban afuera. El mexicano Checo Pérez se metía por primera vez en la temporada en la Q3 con el Force India.
En la Q3 todo volvió a manos del Cavallino Rampante. Kimi marcó 1m31s200 que fue insuperable solo hasta el último segundo de la última vuelta del alemán, quien mejoró en 87 milésimas el tiempo de Raikkonen y se adueño de la pole, pero también del record del circuito chino.