El encargado del control antidóping sostuvo que los jugadores tienen quemaduras de primer grado.
¿Qué pasó? La manga que dirige el vestuario visitante hacia el césped está conectada con la bandeja baja de la tribuna. Al parecer por allí se filtraron la manos de algunas personas y lanzaron un gas que quemó a los jugadores nombrados.
Ponzio terminó siendo el más afectado. Luego ingresaron a un vestuario que está dentro del campo de juego y allí recibieron asistencia médica para verificar si pueden continuar.
"Estoy todo brotado. Los ojos, me arden. No tengo buena visión", dijo Funes Mori.