Hay clima de final para el partido semifinal de la Copa América entre Brasil y Argentina. Y se nota por las calles de Belo Horizonte en el domingo de manifestaciones políticas (hubo una multitudinaria a favor del presidente Jair Bolsonaro).
El Mineirao estará lleno: habrá 62 mil personas. Y se espera un clima de rivalidad intenso. En ese sentido, los encargados de seguridad, a través del vocero, el mayor Flavio Santiago, confirmaron que habrá más de 1000 efectivos cercando el estadio y que al perímetro sólo ingresarán quiénes tengas entradas.
Al mismo tiempo, Santiago ratificó que hay un trabajo conjunto entre la policía de Belo Horizonte y la de Argentina para cruzar datos sobre la presencia de barras. También hay hinchas brasileños con derecho de admisión.
Hasta ahora la Copa América viene tranqui y nadie quiere un problema en el partido que todos estarán mirando (el martes a las 21.30).
La Policía además ratificó que, pese a la particularidad de la rivalidad entre las hinchadas, los públicos de Brasil y de Argentina estarán mezclados. No habrá, como se especuló y como se hizo en Eliminatorias, un espacio "separado" para argentinos.
