La situación de nula actividad en las ligas de Sudamérica podría extenderse, ya que la mayoría de los países de la región decidió prolongar la cuarentena para buscar frenar la pandemia de coronavirus. Ante este panorama y a la espera de que la pelota vuelva a rodar, la Conmebol acercó en las últimas horas un protocolo a la AFA y a las otras asociaciones con una serie de recomendaciones sanitarias que deberán respetarse a rajatablas una vez que los clubes retomen los entrenamientos y las competencias.
La idea de la entidad madre del fútbol sudamericano es dividir no solo la práctica dentro de un campo de juego: además buscará que cada institución respete el protocolo logístico los días de partido. "Los transportes colectivos se harán cuidando las normas establecidas, utilizando mascarillas y guantes y desinfectando los vehículos después de cada servicio", explicó la Conmebol.
Además, un detalle no menor es que la llegada del plantel profesional, cuerpo técnico y personal de trabajo a los estadios podría dividirse en subgrupos para evitar la aglomeración de gente: "Se analiza la posibilidad de realizar el transporte colectivo por grupos, entre jugadores, cuerpo técnico y personal auxiliar, para evitar el contacto entre ellos y procurar mantener la distancia entre personas".
En lo que respecta a los entrenamientos diarios, se hará hincapié en que el cuerpo médico "le tome la temperatura a todo el grupo diariamente", y además el comunicado recomienda no movilizarse fuera del lugar de trabajo.
"Se deben hacer las pruebas de COVID-19 a todas las personas participantes y disponer del aprovisionamiento de agua, alimentos y material necesario para evitar entradas y salidas innecesarias", comunicó.
Las pruebas serán responsabilidad del médico del plantel, quién deberá acudir al domicilio de cada integrante o las hará en las instalaciones del club, pero con la particularidad de que la persona no podrá bajar de su vehículo.
En caso de que alguno dé positivo, la Conmebol recomienda aislar al paciente en su domicilio y volver a realizar el testeo junto a su familia, además de desinfectar la vivienda.
Otro de los puntos es acudir a los espacios de uso comunitario- como gimnasios- en pequeños grupos y con la obligación de cubrir manos y cara: "La utilización de gimnasios se hará por turnos, previamente establecidos, con guantes y mascarillas. El material será desinfectado tras su utilización. En el caso de que haya más de un jugador, procurar mantener una distancia mínima de 3 metros entre ellos", detalló la institución a través de un instructivo que llegó a manos de los cuerpos médicos de los clubes.
Pero el distanciamiento no solo se llevará a cabo en las sesiones que se dan en espacios cerrados, ya que Conmebol recomendó "evitar la concentración de jugadores en los campos de juego". Una medida que ya fue implementada por Bayern Munich y Borussia Dortmund en el reencuentro de ambos planteles, y que obligó a los entrenadores a buscar nuevas metodologías de trabajo.
"El médico deberá identificar al personal indispensable para el funcionamiento del equipo, y además se les otorgará una escarapela de diferente color a los que trabajen aislados de aquellos que lo harán colectivamente", detalló.
A nivel personal, "los jugadores no podrán recibir visitas de personas no habituales en su domicilio y establecerán un protocolo cuidadoso de aislamiento con el personal de servicio en su vivienda".
En la misma sintonía, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) publicó en las últimas horas un comunicado en el que detalla cada una de las normas que se deberán tener en cuenta cuando se reanude la actividad. Los puntos sobresalientes van en una similar línea que la Conmebol, con la particularidad de que la máxima organización del fútbol ibérico desarrolla un plan de pretemporada que va de la mano con la extensión del confinamiento.
"En caso de que la cuarentena sea inferior a las 4 semanas deberán garantizarse un mínimo de 15 días entre el primer entrenamiento y el inicio de la competencia", señaló la RFEF. Y agregó: "En caso de que se prolongue entre 4 y 6 semanas el período mínimo aumentará a 21 días, mientras que se situará en los 30 días de entrenamiento si se confirman las 6 semanas".
También se realizarán exámenes de orina y sangre, y la competencia se podría reorganizar de manera tal que los equipos tendrían la potestad de realizar más de tres cambios, en caso de que algún jugador sufra un problema de salud.
"Para favorecer la competitividad de los equipos, a la vez que se reducen las condiciones que pueden producir lesiones y fatigas excesivas en los jugadores, se recomienda que, además de los 3 cambios convencionales de jugadores, se puedan efectuar hasta 2 cambios más excepcionales, por causas sanitarias, propuestas por el médico y autorizado por el árbitro".