Los 12 jugadores involucrados en la batalla campal que se registró en el partido Estudiantes-Gimnasia del domingo pasado serían castigados con suspensiones de entre 6 y 8 partidos oficiales, según pudo saber Infobae. La decisión ejemplificadora, que sería anunciada el próximo jueves por el Tribunal de Disciplina de la AFA, se basa en un detallado informe presentado por el árbitro del encuentro, Silvio Trucco, quien expulsó a todos los que participaron de la violenta gresca.
El arquero de Estudiantes, Mariano Andújar y el volante Álvaro Pereira, y Roberto Brum y Nicolás Mazzola, de Gimnasia, son los más complicados y recibirían entre 7 y 8 partidos de suspensión. El resto estarán al menos seis encuentros oficiales afuera de las canchas. Se trata por Gimnasia de Javier Mendoza (mediocampista), Antonio Medina (delantero), Federicon Rasic (delantero), y Maximiliano Coronel (defensor). Por Estudiantes, Israel Damonte (mediocampista), Santiago Ascacíbar (volante), y Augusto Solari (mediocampista/defensor).
La decisión del órgano de la AFA (que integran Fernando Mitjans, Eduardo Bozzi, Jorge Gallelli, Hernán González Hudson y Jorge Ballesteros, entre otros) cierra una discusión que se había abierto apenas terminó la violenta pelea, sobre si las penas podrían ser canceladas en partidos amistosos. Así, virtualmente, casi medio plantel titular por cada equipo platense quedará marginado del inicio del campeonato.
Las fuentes confirmaron a Infobae que las duras sanciones -las más severas de la historia de los torneos de verano- serían anunciadas luego de que el árbitro Trucco presentara un informe pormenorizado con la acción que tuvo cada uno de los 12 involucrados en la pelea, quienes fueron expulsados luego del partido que terminó entre jugadores, referís y policías intentado separar a los más violentos.
Trucco presentó el informe luego de revisar las imágenes sobre lo que había ocurrido y dio precisiones de cada jugador sobre cuál fue el accionar violento cometido. De hecho, el referí señaló a un jugador que golpeó a Andújar pero no pudo identificarlo. El propio Tribunal de Disciplina sí lo individualizó y también recibiría una pena por su comportamiento agresivo.
La AFA anunciará el jueves las sanciones a aplicar a los jugadores, luego de que tanto Estudiantes como Gimnasia anticiparan que aplicarán sanciones económicas y trabajo social por el comportamiento antideportivo. Los futbolistas, de hecho, hicieron un mea culpa y reconocieron ser "responsables" por lo ocurrido y estar "avergonzados" por las escenas de violencia del domingo. "La sociedad vive en un estado de locura y nosotros no podemos escaparnos de esto, donde perder una pelota es causal de muerte", dijo hoy Fabián Rinaudo, volante de Gimnasia.
<b>Cómo fueron los incidentes</b>
El partido de la barbarie se desarrolló en un ambiente tenso desde la previa. Horas antes del partido disputado el domingo en el estadio José María Minella un grupo de hinchas de Gimnasia hicieron un banderazo en la Playa Bristol y por el lado de Estudiantes, lo propio en la playa La Serena. En este marco se produjo un choque entre las barras de ambos clubes que terminó con los del "Lobo" robando banderas del "Pincha" que luego fueron exhibidas durante el partido (lo que obligó a dos parates), como signo de victoria.
Durante el encuentro hubo fricción desde antes del minuto de juego con agresiones de ambos lados (la primera falta fue a los 40 segundos). El árbitro Trucco amonestó a 11 jugadores (5 en Estudiantes, 6 en Gimnasia) y expulsó a tres, dos de los cuales fueron por violentísimas faltas, como la de Álvaro Pereira (patada a Facundo Oreja que obligó al jugador a ser retirado en ambulancia) y la de Santiago Ascacíbar por su entrada desde atrás sobre Antonio Medina, acción que desató la barbarie. En el medio el juez le mostró una injusta tarjeta roja al arquero del "Lobo", Enrique Bologna, al aplicar la ley de último recurso por considerar que tocó la pelota con la mano fuera del área en el minuto 90 cuando Solari intentó definir por encima de su cuerpo y en realidad el arquero se interpuso con su pecho.
Esa acción tensó el clima y la patada de Ascacíbar a Medina para cortar la contra de Gimnasia sobre el final, cuando Estudiantes ganaba 1-0, hizo explotar los ánimos. Allí los jugadores se tomaron a golpes de puño primero, otros reaccionaron con patadas después, como Mazzola con Andújar, y pese al intento de algunos por separar lo que ya había tomado tono de escándalo fueron en total 12 los que en rigor de lo que mostraron las imágenes terminaron directamente implicados como autores del escándalo por agresión y terminaron siendo informados y finalmente expulsados.
Estos doce recibirán las sanciones más graves aplicadas en la historia de los torneos de verano, que se disputan desde 1968.