Cuando parecía que no iba a haber más movimientos en el mercado local, se registró el traspaso de un futbolista entre dos clubes grandes. En realidad, indirectamente, porque Diego González rescindió su vínculo con Racing y en las próximas horas firmará con Boca (sería esta tarde, por dos años).
Así lo confirmó el presidente de Lanús, que hizo un intento fallido por contratarlo, en diálogo con PDSRadio: "Del Pulpo a Lanús se viene hablando hace rato pero nosotros tenemos muchos jugadores en esa posición. El jugador tenía la necesidad de salir Racing y le hicimos una propuesta. Le salió la oferta de Boca y la aceptó, el representante había aceptado nuestra oferta pero dijo que le va a dar prioridad a la posibilidad de Boca. Le deseamos lo mejor".
El Pulpo acaba de recuperarse de una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda y no iba a ser tenido en cuenta en la Academia por Sebastián Beccacece, quien ni siquiera lo había incluido en la lista de buena fe de la Copa Libertadores (incluso cuando la Conmebol permitió a los clubes extender la nómina a un total de 40).
La dirigencia de la entidad de Avellaneda tenía decidido allanarle el camino para la salida aunque no esperaba que el Xeneize se metiera en las negociaciones por su continuidad profesional. Víctor Blanco, Presidente académico, había declarado hace unas semanas: "No sé dónde jugará el Pulpo González. Es un tema muy fresco y no hemos definido nada. El representante tendrá opciones y, por respeto, se le dio licencia de 10 días. Si consigue club, Racing lo ayudará para que pueda jugar y no quede relegado".
González era seguido de cerca por Lanús, equipo en el que se formó y debutó como profesional antes de ser vendido al Santos Laguna con un préstamo a Rosario Central en medio. Llegó a Racing en 2016 y tuvo una temporada a préstamo en Xolos de Tijuana (2018/2019). El Granate había avanzado con las tratativas para repatriarlo, pero Juan Román Riquelme metió sus narices y terminó ganando la pulseada. Hay que remarcar que el futbolista en vigencia fue un admirador del ídolo xeneize y se dio el gusto de compartir momentos fuera de la cancha con él.
El último partido oficial jugado por el mediocampista que cuenta en su palmarés con 5 títulos (una Sudamericana y un torneo local con Lanús, uno con Racing y dos con Santos Laguna) fue en septiembre de 2019, cuando los de Avellaneda igualaron 1-1 en Rosario contra Central por la Superliga pasada. Este dato fue contemplado por Miguel Ángel Russo, que igualmente le levantó el pulgar para sumarlo a su plantel.
González puede ser una gran alternativa en la mitad de cancha para el cuerpo técnico boquense, que acaba de perder en ese sector a Iván Marcone (cedido al Elche de España) y se desprendió del colombiano Sebastián Pérez (préstamo a Portugal). Además, el juvenil Agustín Almendra permanece en conflicto con la institución y su vínculo con Boca parece que no tendrá final feliz. La alternativa a Jorman Campuzano y Pol Fernández en la actualidad es Nicolás Capaldo, con juveniles como Cristian Medina, Alexis Albariño y Aaron Molinas por detrás.
En 2014 estuvo muy cerca de ser refuerzo de Boca y seis años más tarde, con mucha más experiencia en su espalda, compartirá club con Riquelme aunque uno estará dentro y otro fuera de la cancha. De esta forma se sumará a los anteriormente incorporados Javier García, Edwin Cardona, Agustín Rossi, Gonzalo Maroni, Walter Bou y Mateo Retegui (los últimos cuatro retornaron de sus respectivos préstamos). A partir de Octavos de Final podrá ser incluido en la lista de la Libertadores. El Xeneize cerrará su participación en la fase de grupos mañana ante el Caracas en la Bombonera.