Daniel Osvaldo sigue sin aparecer y en Boca ya no lo cuentan más. El conflicto que vive en su vida privada luego de la escandalosa separación con Jimena Barón terminó por afectar lo deportivo y lleva tres días sin entrenarse. Una situación que sin dudas ya no da para más.
El martes en Boca argumentaron de manera oficial que Osvaldo tenía una "lumbalgia". El miércoles se habló de "problemas personales". Hoy, otra vez pegó el faltazo y ya no hay nada que decir.
Osvaldo no jugará el domingo ante Newell´s. Ya lo dijo el Vasco Arruabarrena: "Tiene que solucionar sus problemas personales". Y ahora está en duda para viajar a Córdoba para jugar el clásico amistoso contra River del próximo martes 9.
El contrato del delantero con Boca se termina el 30 de junio. Y si bien la dirigencia quería negociar una renovación del préstamo con el Southampton, todos los conflictos personales del jugadores juegan en contra. El final es inminente.