Maravilloso estreno para la Selección Nacional U19 masculina en el Mundial de la categoría, que se disputa en la ciudad de Riga, Letonia. Luego de un primer tiempo difícil, Argentina se recompuso y, con carácter y una inyección de confianza, dio vuelta el partido en el tercer cuarto y se terminó imponiendo por 69-68 ante España, uno de los equipos más fuertes del Mundial. Alejo Azpilicueta lideró la ofensiva con 15 puntos y varios triples oportunos, seguido por las 13 unidades de Juan Fernández y los 11 de Gonzalo Corbalán, el gran responsable de mantener al equipo a tiro en el primer tiempo.
Desde el arranque España desplegó una defensa física y muy agresiva en el perímetro que le cortó la circulación de balón, forzó pérdidas y alejó del aro a nuestros chicos. Argentina, afectada por los nervios y la incertidumbre propia de un estreno, no podía llegar a la pintura rival, no se terminaba de soltar. Del otro costado, los europeos capitalizaron los errores con contragolpes metiendo un parcial de 13-4. Una volcada de Pedro Rossi en transición sobre el cierre del primer cuarto les dio apenas el segundo gol de campo a nuestros chicos y permitió achicar a diez, 21-11 fue el parcial.
<blockquote class="twitter-tweet"><p lang="es" dir="ltr">¡Vamos Argentina! ??? <a href="https://t.co/EfDE01tW6U">https://t.co/EfDE01tW6U</a></p>— CAB (@cabboficial) <a href="https://twitter.com/cabboficial/status/1411332121583656967?ref_src=twsrc%5Etfw">July 3, 2021</a></blockquote> <script async src="https://platform.twitter.com/widgets.js" charset="utf-8"></script>
La tendencia se mantuvo en el segundo período. España forzó pérdidas y se cargó de faltas temprano, pero no dejaba jugar cómodo a su rival. Además, encontró lanzamientos fáciles del otro costado producto de una buena circulación del balón y un mejor ritmo. Un muy buen ingreso del chaqueño Corbalán le dio vida a Argentina, que pudo llegar mejor al gol y se soltó en ataque, recortando el déficit a un solo dígito. Al final del primer tiempo el marcador era 37-28 favorable a España, aunque el segundo cuarto fue 17-16 para Argentina, que se asentó en el juego, mejoró en defensa y se soltó en ataque.
España sacó su ventaja con intensidad, juego físico y una mayor velocidad de ejecución. La estadística era contundente, al final del primer tiempo, nuestros chicos sumaron el doble de pérdidas que goles de campo, 16 balones perdidos contra 8 conversiones.
A la vuelta de los vestuarios, los dirigidos por Daniel Farabello salieron con otro semblante. Decididos a no dejarse intimidar, respondiendo al juego de contacto y más atrevidos en ataque, Argentina pisó el acelerador y se puso a uno. Con el cambio de actitud, también empezaron a soltarse y a aparecer más individualidades. Surgió la puntería de Azpilicueta y el talento de Díaz para desequilibrar. La racha de 25-15 en el tercer cuarto irradió confianza e hizo sentir que era posible. Todos empezaron a aportar y Argentina encaró el último parcial con una ventaja mínima: 53-52.
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El último cuarto fue tenso. España estuvo al borde de tomar el comando del partido en varias oportunidades. Argentina sintió el desgaste y lo pagó en defensa. Pero la llama que se encendió en el tercer cuarto despertó la confianza del equipo que no se dejó intimidar. Una conversión oportuna de Corbalán empató el juego a falta de 52 segundos y Fernández sumó desde la línea para irse por la mínima al frente. El cierre fue una orquesta de imprecisiones en ambos lados, en la que España tuvo el tiro del final y falló.
Victoria festejada y resonante de Argentina ante un rival europeo. Los chicos volverán al ruedo este domingo a las 5.30am, hora de nuestro país, ante Corea, que cayó con contundencia en el debut por 117-48 ante la poderosa Francia