Racing, que hace poco quedó eliminado de la Copa Libertadores, hoy debía demostrar otra muestra de carácter tras el cimbronazo que vivió en la semana por el inesperado doping positivo de Brian Fernández. En el Cilindro, con la idea de ganar para finalizar como escolta, recibió a Vélez.
Si bien la primera jugada de peligro fue para la visita, mediante una buena media vuelta de Mariano Pavone, con el correr de los minutos el cuadro comandado por Diego Cocca comenzó a hacerse con el balón, pero le faltaba fineza, e ideas, en los últimos metros.
Igualmente, la "Academia" comenzó a desnivelar el juego gracias a sus individualidades. El primer aviso fue en una jugada preparada en un córner. Fabián Cubero sucumbió ante una cortina y Luciano Lollo apareció solo para cabecear, aunque chocó con una formidable volada de Alan Aguerre.
Luego, con un pelotazo frontal de más de 30 metros, Lollo le metió una buena pelota para Francisco Cerro, quien se desprendió de manera inesperada y tiró un sombrero en el medio del área, el cual se vio cortado por una mano de Hernán Pellerano. Fernando Echenique no dudó y sancionó penal y amonestó al defensor. Diego Milito tenía una gran oportunidad, pero no pudo ante el joven portero rival.
Igualmente, a los pocos minutos, los de Avellaneda tuvieron revancha, nuevamente desde los doce pasos -una discutible decisión del árbitro-. Emiliano Amor se tiró al piso y bajó a Gustavo Bou. Fue la propia "Pantera" quien la cambió en gol gracias a un buen remate cruzado.
Para cerrar, el hombre de negro volvió a quedar en el medio de las críticas para los de Liniers. Mariano Pavone, dentro del área, intentó tirar un centro que pegó en el brazo de Lollo. Toda el "Fortín" pidió la pena máxima, pero el colegiado consideró que fue 'casual'.
En el complemento, para no pasar sofocones, el local salió decidido a aumentar el marcador y conseguir la calma. Luciano Aued le puso un lindo pase en cortada a Bou, quien no pudo ante el rápido achique del '1'. Pero, justamente de esa jugada, que derivó en un córner, consiguió aumentar. Washington Camacho se anticipó en un córner para estirar la diferencia.
Los de Russo no encontraban los caminos, y encima sufrieron la expulsión de Matías Pérez Acuña (planchazo a Germán Voboril -ingresó por Leandro Grimi, lesionado-). Pese a todo esto, a poco del final Fausto Grillo, con un testazo, descontó y le puso dramatismo al desenlace del partido.
Igualmente, fue un instante lo que duró la ilusión de Vélez. Bou volvió a perder ante la figura de Aguerre, pero en el rebote Milito no perdonó. El capitán, con un fierrazo, le rompió el arco a la visita. Y, como si le faltaba algo al 'piberío' de los de Liniers, Grillo propinó una brutal patada que le valió ver la roja.
Con este 3 a 1, Racing dejó de manera muy rápida el escándalo del doping y llega al receso dentro del podio del fútbol argentino, a sólo dos unidades del líder San Lorenzo. El "Fortín", en cambio, volvió a pagar caro el torneo de transición -busca nivelar las finanzas-. Quedaron en al mitad de la tabla, con 18 puntos.