Hace unos días, Marcelo Gallardo puso el grito en el cielo al ver el estado del césped del Monumental. El técnico de River no podía creer lo que veía: metros y metros de pasto quemado.
Los encargados de cuidar el campo de juego se equivocaron de producto fertilizante y mataron el pasto. En River trabajaron muy fuerte en estos días y ya se ve una gran mejoría.
<b>Así estaba el campo de juego</b>