Transcurrían 10 minutos del primer tiempo cuando, tras un pase largo de un compañero, Christian Cueva, delantero de Perú, enfrentó a Franco Armani, arquero de la Selección Argentina. El atacante cayó y los corazones argentinos se paralizaron cuando el árbitro Wilmar Roldán, quien no había sancionado nada, fue llamado por el VAR para revisar la jugada por un posible penal.
"Para mí es acción del juego, lo toma corriendo y es inevitable el choque", lanza Roldan apenas finaliza la acción. Sin embargo, la orden inmediata por parte de los encargados de la tecnología es clara: "Wilmar, no reanudes".
Luego de ver reiteradas veces las imágenes, Andrés Rojas, árbitro encargado del VAR sostiene que hay un contacto y le dice a su colega: "Wilmar, te recomiendo un On Field Review, potencial penal del portero sobre el atacante".
Tras revisar la acción varias veces, Roldan, muy convencido de la decisión de que había tomado en primera instancia, le manifiesta a sus compañeros: "Andrés, escúchame, primero llega el arquero y posiciona el pie. No hay un movimiento, el toque del delantero es inevitable con el arquero. Para mí no es penal, mantengo mi decisión".