La última prueba para el seleccionado argentino de básquet antes del comienzo del Mundial es la más complicada de todas. Es que el rival de hoy (a las 17) es España, que no sólo será local en el torneo sino que también es el candidato al título. Si bien todavía es momento de ensayos, ninguno de los dos equipos va a regalar nada hoy en el Palacio de los Deportes de Madrid.
La Argentina llega tras haber mejorado la imagen dejada en los amistosos jugados en Serbia (derrotas ante el local 87-65 y con Puerto Rico 97-87) con el triunfo del sábado ante la débil Estonia por 89-72. Allí se pudieron destacar varios puntos salientes, como la regularidad de Walter Herrmann como sexto hombre, el mejor nivel de Andrés Nocioni como goleador y la conducción de Facundo Campazzo.
Por su parte, los locales están invictos en la preparación con triunfos ante Canadá, Angola, Turquía, Senegal y Croacia. Cuentan con los hermanos Pau (Chicago Bulls) y Marc Gasol (Memphis Grizzlies) como figuras, además de estrellas como Ricky Rubio (base de Minnesota Timberwolves), José Calderón (base de New York Knicks) o Serge Ibaka (pivote de Oklahoma City Thunder). España es, junto a Estados Unidos, el equipo más fuerte del campeonato que arranca el sábado y forma parte del grupo A junto a Brasil, Francia, Serbia, Egipto e Irán. Además, puede ser rival del conjunto de Julio Lamas en los octavos de final.
La Argentina, con Luis Scola como capitán y figura, formará parte del grupo B con Grecia, Croacia, Filipinas, Senegal y Puerto Rico, que será el rival del debut el sábado, en Sevilla.