Desaparición de Lian. Se cumplen tres semanas desde que Lian Flores desapareció en Córdoba. Pese a la conmoción que causó el caso en un primer momento a nivel nacional, no hay novedades en la investigación que permitan esclarecer qué ocurrió.
El pequeño fue visto por última vez en un cortadero de ladrillos en Ballesteros Sud, el 22 de febrero; el niño de tan solo 3 años sigue desaparecido y poco se sabe de lo que pasó con él aquel día.
El abogado de la familia, Darío Baggini, indicó que “todavía no hay una pisa firme y concreta” sobre lo ocurrido, por lo cual la Justicia investiga “hipótesis de los más variadas, desde un accidente a un homicidio o una eventual red de trata de personas”.
La hipótesis más firme
Consideró que la posibilidad de la “trata de personas es extremadamente compleja porque si bien muchas veces estamos ante redes internacionales con amplia logística, que se hayan dado las circunstancias de que ese niño esté a cierta hora solo y sin que nadie lo vea es realmente complejo. Hubiese requerido de una persona apostada en un lugar semanas para esperar esas condiciones”.
Profundizó en tal sentido que “la hipótesis que manejamos desde el estudio es que alguien pudo haber entrado a un horno abandonado para sustraer ladrillos, que lo haya atropellado y que en ese momento en vez de llamar a la Policía o los bomberos se lo haya llevado. Esto es más simple y tiene cierta lógica”.
Argumentó que “en el camino había huellas de un vehículo que estaban muy cerquita de un chiquero donde había tres chanchitos a los que Lian solía tirarles granitos de maíz y se divertía al ver cómo se peleaban entre ellos. A escasos 15 metros está el horno abandonado. Esta hipótesis tiene cierto sustento probatorio”.
Investigación y desesperación de la familia
Lamentó que “el relevo de cámaras y celulares secuestrados hasta la fecha no colocan a un vehículo” en el horario de la siesta “en el lugar”.
Interrogado durante el programa Nunca es Tarde sobre la situación de la curandera a la que le allanaron el domicilio en Jujuy, manifestó que “es una línea investigativa que aún no se descarta porque tiene cierta lógica porque esa mujer estuvo 15 días en inmediaciones del lugar y durmió en la casa de Lian”.
Finalmente, se refirió a lo que sienten los allegados al chico. “Es inexplicable porque, por más empáticos que podamos ser, no existe posibilidad de ponernos en los zapatos de una familia a la que le desaparece un hijo. No hay rastros del niño y para la familia es desesperante, tal es así que a la noche escuchan ladrar los perros y salen a ver si les dejaron el niño en inmediaciones del hogar”.
