Desde este lunes, Entre Ríos es una de las primeras provincias en sumarse al acuerdo con el ente nacional para establecer un estándar sanitario para los frigoríficos provinciales y municipales. "Se trata de generar una inocuidad uniforme para todos los frigoríficos, independientemente si están habilitados o no por el Senasa. Trabajamos juntos para mejorar la calidad y la situación de los frigoríficos", explicó Cortese.
El convenio prevé un plan de trabajo articulado que, en una primera etapa, determina el relevamiento de los establecimientos con habilitación provincial y el diagnóstico de sus condiciones higiénico-sanitarias. Además, contempla la formación en criterios, metodologías y fiscalización de los frigoríficos destinado a los supervisores, directores técnicos, jefes del Servicio de Inspección Veterinaria, encargados de calidad y demás personal de la totalidad de las plantas.
También se instrumentarán jornadas periódicas de capacitación en inocuidad alimentaria (inocuidad de los alimentos, salud pública, enfermedades transmisibles por los alimentos - ETAs-) para responsables de ese tipo de plantas.
Se trata de un enfoque integral para abordar de manera más efectiva los desafíos relacionados con la calidad, la seguridad y la inocuidad de los alimentos, asegurando que las prácticas se desarrollen bajo estándares óptimos que beneficien tanto a los productores como a los consumidores finales.
La rúbrica tuvo lugar en la Casa de Entre Ríos y del acto también tomó parte el director regional Entre Ríos del Senasa, Néstor Micheloud. Entre Ríos se suma, así, a la normativa a escala nacional que ya tiene aplicación en provincias como Salta, Tucumán y Corrientes.