Un hombre de nacionalidad brasileña, que acababa de salir de una fiesta alcoholizado, estuvo involucrado en un impresionante choque en cadena en el centro de la ciudad correntina de Curuzú Cuatiá.
El incidente ocurrió cuando el conductor, “completamente borracho” según el test de alcoholemia realizado por los agentes de tránsito locales, impactó contra varios autos estacionados y otro en circulación antes de terminar dentro de un zanjón, difundió el Diario Época. No se registraron víctimas, aunque los daños materiales fueron significativos.
Detalles
Este accidente tuvo lugar alrededor de las 9 de la mañana, cuando el infractor regresaba de una celebración, aparentemente celebrada en la parrilla que él mismo posee en la zona de acceso a la ciudad. Perdió el control del vehículo y colisionó directamente con un Chevrolet Corsa que estaba estacionado en calle Rodríguez Peña, casi Caá Guazú. Luego, continuó su trayecto chocando contra otro automóvil en movimiento.
Dicho impacto inicial hizo que el automóvil del conductor se descontrolara, saliendo a gran velocidad hacia un lateral donde colisionó violentamente contra otros dos vehículos estacionados. Uno de ellos pertenecía a una docente jubilada, mientras que el otro era propiedad de un médico de la delegación local del PAMI; automóvil del juez de Faltas municipal, que se encontraba cerca, sufrió daños mínimos y se salvó por poco del desastre.
Este descontrolado viaje culminó con su auto y él mismo dentro de un profundo zanjón en la calle Azcuénaga. El vehículo fue finalmente rescatado minutos después por una grúa. El incidente, ocurrido a primera hora de la mañana, causó una gran conmoción en la zona céntrica de Curuzú Cuatiá, que se vio saturada de móviles policiales y patrullas municipales.
Asistencia médica y consecuencias legales para el conductor
El conductor también recibió asistencia médica de una ambulancia y fue trasladado al hospital Fernando Irastorza. A pesar de que solo sufrió golpes menores, fue atendido de manera preventiva.
Según fuentes locales, el test de alcoholemia realizado por los agentes municipales de la Dirección de Tránsito reveló un elevado nivel de alcohol en sangre.
Por orden de las autoridades judiciales, el automovilista irresponsable ha sido acusado de "conducción peligrosa".
Su vehículo ha sido secuestrado y llevado a la Dirección de Tránsito. En tanto, el conductor deberá enfrentar varias multas impuestas durante el incidente y responsabilizarse por los daños ocasionados a los cuatro vehículos afectados.