Nunca como este sábado el mundo Boca estuvo tan pendiente a la liga de Arabia Saudita. Si bien jugó el Al-Nassr de Cristiano Ronaldo, en Brandsen 805 y en el predio de Ezeiza siguieron minuto a minuto el partido entre Al-Shabab y Al-Wahda, que representó la despedida de Éver Banega.
El volante argentino fue titular en su último partido en el equipo de la capital Riad, disputó todos los minutos y festejó el 1-0 sobre el cierre gracias a Abdullah Radif, quien le terminó dedicándole el gol al rosarino: apenas la pelota sacudió las redes, se fue hacia un costado de la cancha y lo señaló ante las cámaras mientras sonreía. Incluso, hasta fue ovacionado por los hinchas ni bien terminó el encuentro y se lo vio visiblemente emocionado.
Pero hay algo que traba su situación: Éver espera una oferta formal de Boca más allá de que lo esperan con los brazos abiertos y hasta que no aparezca no podrá firmar su desvinculación. Lo cierto es que el ex-Sevilla tiene decidido por motivos personales regresar al país y vestir la camiseta azul y oro, por eso está haciendo lo posible de su parte para salir de Al-Shabab, a tal punto que resignaría cuatro millones de dólares, los que ganaría allí de enero a mayo del 2024, mes en el que termina la competencia.
Después de haberse convertido en un referente del Sevilla de España, a mediados de 2020, el mediocampista partió al fútbol árabe, donde se mantuvo con mucho rodaje y se convirtió en capitán. En la última temporada sumó 19 partidos -17 como titular-, convirtió dos goles y brindó la misma cantidad de asistencias.
(TyCSports)