La derrota del París Saint-Germain (PSG) por 1-0 ante Bayern Múnich volvió a instalar un manto de incertidumbre dentro de la entidad que lucha temporada tras temporada por la obtención de la UEFA Champions League. Esa obsesión fue acompañada de refuerzos rutilantes en los últimos años, pero el más oneroso fue, sin lugar a dudas, Neymar. A la luz de los hechos, los USD 237 millones pagados al Barcelona fueron una inversión irrecuperable por el astro brasileño de 31 años. Además, su polémica vida extrafutbolística erosionó su figura hasta tener en carpeta la posibilidad de alejarse de la capital francesa en el próximo mercado de pases para ser compañero de Enzo Fernández.
El diario francés Le Parisien divulgó que el propietario del Chelsea, Todd Boehly, se reunió con el presidente del PSG, Nasser Al-Khelaïfi, en un hotel ubicado en las cercanías a la Plaza Charles de Gaulle, un emblemático lugar de París. El cónclave tuvo lugar este martes y la información apunta a que mantuvieron una conversación porque Les Bleus pretenden hacerse de los servicios de Ney en la siguiente ventana de traspasos, a pesar de que aún tiene contrato hasta 2027.
Vale destacar que, en su rol de presidente de la Asociación de Clubes Europeos (ECA, por sus siglas en inglés), Al-Khelaïfi tiene reuniones permanentes con los dirigentes de los principales clubes del Viejo Continente con temas referidos al desarrollo del fútbol o la batalla que se libra en contra de la Superliga Europea, entre otros. Pero también estas circunstancias pueden servir para abordar situaciones referidas a la institución que preside.
Las relaciones entre ambos equipos no posee el mejor antecedente porque sobre el cierre del mercado el líder de la Ligue 1 intentó reforzarse con Hakim Ziyech, pero un cruce erróneo de documentación privó su llegada y la posibilidad de buscar un reemplazante a esa alternativa. Sin embargo, la fuente citada cuenta que Boehly adora el talento del extremo sudamericano y no encontró una férrea oposición para su partida a Londres.
El ex hombre del Santos de Brasil acumula 17 festejos y 16 asistencias en 28 partidos de la presente temporada, pero Neymar ya estaría cansado de las críticas acumuladas contra su persona por la vida que mantiene fuera de las canchas, cuyo último antecedente fue ausentarse del funeral a Pelé para asistir a una fiesta en enero último. Este marco y su intención de marcharse podrían posibilitar una salida anticipada por una cifra cercana a los USD 64 millones. A pesar de que su sueldo neto ronda los USD 38 millones, todos los montos serían asequibles por los Blues, que ya gastaron una millonada en la llegada de incorporaciones durante el presente curso.
En este sentido, su sueldo y la necesidad del París Saint-Germain por vender para evitar una nueva sanción por incumplimiento del Fair Play Financiero acelerarían su partida. Una fuente cercana a las tratativas le confió esta mirada al periódico europeo: "El PSG estaría incluso dispuesto a dejarlo marchar para ahorrarse su salario y deshacerse de un jugador con una imagen degradada".
Luego de un interés frustrado en 2022, Chelsea vuelve a la carga por el máximo goleador de la selección de Brasil, quien se podría reunir con un entrenador que lo llenó de alegrías. La mala campaña de Graham Potter en el banco de suplentes motorizó la búsqueda de un posible reemplazante, que ya tendría nombre si el ciclo llega a su fin: Luis Enrique. Ambos compartieron vestuario en el Blaugrana durante 2014 y 2017, tiempo en el que ganaron nueve títulos, entre ellos una Champions League, un Mundial de Clubes y dos Ligas de España.
Le Parisien contactó al PSG, que negó de forma categórica "cualquier intención de vender a Neymar, así como cualquier reunión relacionada con este tema". De igual forma, es un mensaje lógico teniendo en cuenta que el club atraviesa una etapa decisiva de la temporada y necesita de él, como también de Lionel Messi y Kylian Mbappé, para mantener vivo el sueño de la Orejona. En consonancia, este diario insistió en su afirmación sobre el futuro de un futbolista que sufrió distintos párates por lesiones y nunca logró hacerse imprescindible entre los hinchas.