La acción fue el eje de la polémica tras el partido, una vez que el árbitro Fernando Rapallini desechara la sanción de la pena máxima y diera por terminado el encuentro con el marcador igualado en cero.
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El juez que asistirá al Mundial Qatar 2022 se apoyó en las imágenes del VAR a cargo de Fernando Espinoza para entender que la mano de Gómez no fue intencional, aunque las repeticiones de la transmisión televisiva demostraron que el futbolista de Racing controló la trayectoria del balón con la palma de su mano izquierda, antes de incorporarse para despejarlo del área, apareado por el delantero de Boca.
Una imagen con otro ángulo, que no formó parte del material recogido por el VAR, comprueba que Villa se lanza peligrosamente con sus pies hacia adelante e impacta en el tobillo derecho de su rival.
<i>La herida provocada por la presunta falta a Jonathan Gómez, que habría implicado además la rotura de su canillera.</i>
Además, circuló también una foto de la pierna de Gómez en la que se aprecia una considerable herida producto del roce de los botines del colombiano, que además le produjo la rotura de la canillera.