El Paris Saint-Germain le ganó 3-1 al Saint-Etienne, por la fecha 15 de la Ligue 1. El conjunto de Mauricio Pochettino, venció a su rival de turno con dos goles de Marquinhos y uno de Ángel Di María, tras tres asistencias de Lionel Messi. Asimismo, Neymar encendió todas las alarmas en la capital francesa, ya que salió lesionado, en camilla y entre lágrimas.
Lionel Messi demostró, una vez más, que pese a no tener un gran partido fue vital para la victoria del PSG ante el Saint-Etienne, por 3-1. El argentino fue el encargado de asistir en todos los tantos de su equipo, que tuvieron como autores a Marquinhos, en dos oportunidades y a Ángel Di María.
De esta manera, el equipo de la capital sigue puntero en la Ligue 1, a catorce puntos del Niza, su inmediato perseguidor, que aún tiene que jugar.
El PSG dominó con claridad durante todo el partido, aunque el marcador se le resistió en principio. Sergio Ramos, que hizo su debut, apenas tuvo trabajo ante un rival inferior y cumplió en cuantas acciones participó.
En el minuto 23 el Saint-Etienne marcó por medio de Denis Bouanga, tras rematar un rebote dentro del área, pero el gol fue anulado por el árbitro. Sin embargo, tras la intervención del VAR, se dio por válido el tanto.
El PSG dominó en la posesión, 30-70, pero sin ocasiones claras de gol, salvo una de Kylian Mbappé, en el minuto 41, con un disparo que el arquero local despejó tras una gran parada.
El equipo capitalino empató en el descuento antes del descanso. Lionel Messi lanzó un tiro libre que Marquinhos remató de cabeza desde el centro del área para poner llegar a la igualdad.
En la segunda parte, el PSG incrementó su dominio y comenzaron a llegar las ocasiones de gol. Mbappé se perdió una clara ocasión en el minuto 60, que se fue por arriba del travesaño y Messi tampoco estuvo claro en la definición en el minuto 69.
Por fin, en el 79, la conexión argentina funcionó. Messi metió un pase filtrado en el área grande para Ángel Di María que derrotó al arquero con un disparo cruzadopara marcar el 2-1 parcial.
En el final, Messi envió un centro bombeado al área que Marquinhos cabeceara nuevamente cerca del poste izquierdo para porner el 1-3 definitivo.