La corrupción en el fútbol está cada vez más al descubierto y los juicios avanzan en pos de revelar y condenar los desmanejos y negocios oscuros que rondan a la pelota. Una de las consecuencias que podrían tener estos procesos, por decisión de FIFA, es el cambio de sede para el Mundial 2022, que por ahora se disputará en Qatar.
Con el agregado de que la seguridad en la región geográfica generaría dudas en el público, en Zurich analizan una triple sede como alternativa: se trata de la alianza norteamericana entre México, Estados Unidos y Canadá, quienes, según trascendidos, ya recibieron la visita de los directivos de FIFA para las primeras evaluaciones, publica <i>TyC.</i>
Claro que desde Qatar la respuesta es una certera negativa, debido a la inversión multimillonaria que se ha realizado en estadios hasta el momento, incluso con la presentación hace poco tiempo de una estructura completamente desmontable para la sede de Doha, con el Ras Abu Aboud Stadium.