"Más tuvo que ver Messi pero este hombre tuvo mucho que ver", dijo el martes a la noche el presidente de la AFA, Claudio Chiqui Tapia, tras la clasificación de la selección argentina al Mundial. "Este hombre" es el brujo Manuel, que fue llevado por la dirigencia del fútbol argentino a Quito para destrabar la "mala energía" que supuestamente rodeaba a la selección.
<b>Las razones de la mala energía</b>
Según trascendió, Manuel Valdez ya había estado la semana pasada en el complejo de Ezeiza, recomendado por Juan Sebastián Verón y otros dirigentes, y luego de haber recibido el llamado de un integrante del cuerpo técnico. Finalmente, el martes arribó a la capital ecuatoriana para llevar a cabo su trabajo espiritual junto al conjunto de Jorge Sampaoli.
En diálogo con <i>Crónica</i>, el místico expresó que "la frustración de la Selección venía de hace tiempo, de una promesa quebrada hace muchos años y también porque Brasil le dio duro para que no saliera campeón contra Alemania", recordando la final del Mundial 2014 y la supuesta promesa incumplida del plantel de 1986 a la Virgen de Tilcara.
<b>Relación con el fútbol</b>
Manuel tiene un vínculo especial con el fútbol. Fue una especie de cábala del plantel de Estudiantes que ganó la Copa Libertadores 2009 con la Brujita Verón como líder. Allí conoció al actual presidente del Pincha y comenzó a tener un vínculo cada vez más estrecho con esa institución.
"Siempre veo fútbol. La Selección tenía mala energía, había unas cosas hechas y no podían hacer goles. Fui y destrabé eso", explicó sobre su "trabajo" con el equipo.
Manuel, que tiene su "consultorio" en La Plata, ahora va por más: "Me encantaría ir a Rusia".
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