Miles de aficionados del Real Madrid se congregaron en la fuente de Cibeles para festejar la obtención del 33º título liguero del equipo blanco y esperaron hasta la madrugada para recibir al equipo.
Al grito de "¡Campeones, campeones!" los hinchas celebraron la llegada del micro del equipo a la céntrica plaza madrileña con la fuente de la diosa.
Los jugadores llegaron en un micro blanco descubierto con el número 33 escrito en negro para celebrar el nuevo título, escoltado por policías a caballo.
El capital del equipo Sergio Ramos vistió a la diosa con la bandera del Madrid, que además fue engalanada por Marcelo con una bufanda del club en la cabeza, mientras sonaba la canción "We Are the Champions".
Los hinchas blancos habían ido llenando la céntrica plaza desde que terminó el partido con el que el RealMadrid se impuso por 2-1 ante el Málaga, con tantos de Ronaldo y del francés Karim Benzema.
Cinco años después del último titulo liguero la fiesta en Cibeles expresó toda la alegría de un equipo, que ahora busca también el próximo 3 de junio imponerse a la Juventus para ganar la final de la Liga de Campeones en Cardiff.
Más allá de la pacífica celebración en el mítico lugar de la ciudad, no podían faltar los cánticos para los "enemigos" futbolísticos. "Piqué cabrón, saluda al campeón", fue la dedicatoria para el defensor del Barcelona que suele ponerle mucha pimienta a los duelos entre los dos equipos más poderosos de España. También hubo tiempo para acordarse del Atlético de Madrid, rival al que el Merengue le ganó dos finales de Champions League y hace unas semanas eliminó en semifinales de esa misma competición.