Con ocasión del 30º aniversario del primer campeonato de Italia ganado por su club
en 1987, Nápoles acaba de ofrecerse un imponente fresco mural a la gloria de su campeón de siempre, el legendario número diez argentino Diego Maradona.
Realizado por el artista napolitano Jorit Agoch, el fresco adorna uno de los extremos de un gran bloque de inmuebles de San Giovanni Teduccio, un barrio difícil apodado el "Bronx" de Nápoles.
Un inmenso Maradona con mirada orgullosa y barbudo se encuentra en la ciudad que lo adula desde que el delantero argentino llevara a su club a la cima de su historia entre 1984 et 1991.
"Cuando Maradona llegó a Nápoles, yo tenía 16 años. Lo seguí por todos los estadios de Italia. Siempre fui un ultra del Nápoles y estoy muy contento de que esté aquí con nosotros", declaró a la AFP, Mario, un residente del barrio, de 49 años.
"Para mí, fue el mejor jugador de la historia. En Nápoles, ahora es venerado como un santo", explicó a la AFP Giuseppe, un antiguo marino, ahora jubilado, recordando al mismo tiempo las
críticas por "su estilo de vida desordenado" o sus maniobras para escapar al fisco.
Para una responsable asociativa citada por el diario La Repubblica, "las obras como la de Jorit no resuelven los problemas que tiene el barrio desde hace 30 años, pero atraen los proyectores sobre nosotros. Queremos creer que hay una esperanza". AFP-NA