"Soy indomable y siempre hago lo que quiero", admitió Griselda Siciliani. Y estas palabras sirvieron de título de portada de la nueva revista Gente, que la tiene en corpiño. La actriz se jugó a la hora de dar la nota para ayudar a la promoción de "Educando Nina", la tira que estrenará el lunes Telefe a las 21.30.
Con siete kilos menos, Siciliani posó en un balcón con un corpiño de encaje. Quiso llamar la atención, tal vez como estrategia de marketing de lo que será la historia de Telefe en la que compondrá a dos personajes.
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Madre de Margarita, mujer del Gerente de Programación de El Trece, decidió este año competir con su marido en lugar de alistarse a una tira de ese canal. En la trama, Nina es bailarina y corista de bailanta, simpática, sexy, bella. Sueña con un futuro de estrella de cuarteto. Y fue educada en la filosofía del esfuerzo y el trabajo. Es mal hablada, impulsiva, pasional pero también una seda, sensible y amorosa.
"Tantos años de danza me enseñaron a ser libre con mi cuerpo, pero también más atenta y minuciosa. Sí, estoy flaca, pero me gustaría estar más entrenada. Alguna vez pensé retocarme las lolas después de amamantar, pero no me animo. Les tomé cariño así, sufriditas y pequeñas. No me gustan las tetas grandes. Las cirugías tienen que ver con falencias personales, una crisis que yo no transito", dijo.
Por último, hizo una confesión sin filtro: "Soy muy celosa en tanto mi marido mire a una mujer que también me guste. Si no registro competencia, puede ser hasta gracioso. Pero los celos son un sentimiento bastante pelotudo. Por pudor, hago un ejercicio interno para reprimir las escenitas. A menos que abra una puerta y vea a mi marido en 'ese' momento, siento que esas fantasías son un tema mío y él no tiene por qué aguantármelas", cerró.
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