Almagro dio vuelta el partido en el segundo tiempo y venció esta tarde de visitante 2 a 1 a Independiente Rivadavia, que ya mira de reojo el promedio del descenso, en el marco de la novena fecha del torneo de la Primera B Nacional.
El local, con la corpulencia física de algunos hombres, fundamentalmente Juan Pablo Pereyra, complicó por arriba a la defensa Tricolor y por esa vía llegaron las situaciones más claras.
Primero lo tuvo Bustamante, que con golpe de cabeza tras un centro de Aguirre les ganó a todos y la pelota pegó en el travesaño. Pero pocos minutos después, el defensor tuvo su premio, cuando otra vez de cabeza conectó un centro de Abelairas para dejar sin chances al arquero Gómez y poner el uno a cero.
Al equipo de José Ingenieros, que venía en alza e invicto de visitante, pese al despliegue de Sardella y Espínola en el medio, el aporte de Gallegos y la peligrosidad ofensiva de su delantero Altamirano, le faltó profundidad en el área mendocina.
En el complemento, el Tricolor se animó un poco más, se adelantó unos metros y eso, sumado al retraso de los locales, le permitió mayor protagonismo, más allá de quedar expuesto al contragolpe, fundamentalmente por la velocidad de Gautier.
El empate llegó en forma impensada, cuando un remate de Altamirano fue desviado por Agüero en su afán de rechazar y venció su propio arco ante la sorpresa de Scapparoni que había quedado a mitad de camino.
Independiente Rivadavia intentó recuperarse, pero Almagro apostó al contragolpe. La visita lo tuvo primero por intermedio de Gallegos, que estrelló la pelota en el travesaño, y luego Bordonaro,, ante una mala salida del arquero puso de cabeza el 2-1 final y hundió al Azul, que sumó su segunda derrota consecutiva en la era del Profe Córdoba.