En base a una defensa asfixiante y con mucha claridad para atacar el aro rival, Quimsa comenzó mejor el quinto juego de la finalísima de la Liga.
Los santiagueños anularon la ofensiva de Gimnasia, mientras que en ataque lastimó con un contundente Leonardo Mainoldi, logrando meter un parcial de 10-0 en 2 minutos. Los patagónicos reaccionaron con las bombas de Cavaco y Aguerre para empatar el juego en 10 promediando el tramo.
Pero los dirigidos por Silvio Santander fueron más inteligentes y cerraron con los lanzamientos de Aguirre para quedarse con el primer chico por 23-19.
En el segundo cuarto el nivel del juego cayo y el partido por momentos se volvió ordinario. En esta etapa las defensas superaron con claridad a los ataques, donde tanto Gimnasia como Quimsa abusaron de los tiros perimetrales con muy baja efectividad.
Promediando el parcial Quimsa encontró soluciones ofensivas con los lanzamientos a distancia de Pérez y Garcia, para llegar al entretiempo ganando por 40-31.
En el comienzo de la tercera etapa Quimsa encontró fluidez en ataque con el tándem Aguirre-Battle y sacó una diferencia de 18 puntos al ponerse al frente por 50-33.
Gimnasia se despertó después de un tiempo muerto pedido por Garcia y achicó diferencias (52-46) con los triples de Scala y las penetraciones de Cavaco . El cierre fue parejo y así los santiagueños mantuvieron la diferencia al llegar a la última etapa ganando por 63-54.
En la última etapa la visita ajusto en defensa y anuló a Quimsa, en tanto que en ataque complico con Scala y Schattmann para ponerse 48-52.
Promediando el parcial los locales se tranquilizaron, se pusieron firmes en defensa y en ataque aparecieron los triples de Diego García para quebrar el partido para quedarse con un triunfo clave para ir a buscar el título a Comodoro Rivadavia.