Luego del Juego de las Estrellas de la NBA, el mejor básquetbol del mundo volvió a tener acción y San Antonio Spurs cayó ante Los Angeles Clippers, que se impusieron 119-115 en uno de los dos partidos que se disputaron anoche.
Manu Ginóbili jugó casi 25 minutos para los Spurs y terminó con 10 puntos (tres dobles, cuatro libres), dio seis asistencias, capturó un rebote y cometió cuatro faltas. Los Spurs tienen un récord de 34 victorias y 20 derrotas y están séptimos en la conferencia oeste.
Ayer los Clippers sobrevivieron al "Hack-a-DeAndre", la táctica que varios equipos de la NBA utilizan contra ellos: cometerle faltas al pivote DeAndre Jordan para que tire libres, donde tiene muy baja efectividad. Ayer acertó 10 de 28 libres y terminó con 26 puntos y 18 rebotes.
"Es una parte del básquetbol", dijo ayer Tim Duncan sobre las constantes faltas de los Spurs ante el jugador. "Cuando empiece a encestar mejor, la gente dejará de hacerlo. Nos valió y nos dio una oportunidad. Por desgracia, en estas ocasiones no pudimos lograr suficientes puntos y sostener nuestra ofensiva como para ganar ventaja y distanciarnos", agregó.
"Soy grande, tengo sentimientos también", bromeó DeAndre Jordan tras el partido. "Es sólo que odio que no podamos simplemente correr y jugar", dijo luego el pivote.
En el otro encuentro de la jornada, el Thunder de Oklahoma City ganó 104-89 a los Mavericks de Dallas.