El Día Osvaldo fue finalmente un miércoles. Las idas y vueltas se terminaron. El delantero llegó por la mañana, se hizo la revisión médica por la tarde y en la nochecita puso la firma para poder gritar a los cuatro vientos su sueño cumplido: va a jugar en Boca. Como el presidente Angelici está de vacaciones, firmó el acuerdo con Boca con el secretario general del club, Cesar Martucci.
Luego de 12 horas de vuelo y de verse sorprendido por el recibimiento, Osvaldo había dicho que “este es el sueño más grande de mi vida. Ya me imagino lo que es Boca, nunca me recibió tanta gente”.
Y si bien insistió en que no quería decir nada por una cuestión de cábala, ahora que firmó podrá hablar tranquilo de su sueño bostero. “Hace 20 días que no me entrenaba con el equipo, estaba practicando solo. Igual, enseguida me pongo bien. En Boca hay que ganar todo”, explicó.
Boca suma entonces un delantero de jerarquía. “Vengo a sumarme a un plantel, a aportarle lo mejor de mí al equipo. Antes lo vivía como hincha, desde atrás del alambrado. Espero que ahora salga todo bien”, cerró.
Ahora esperan que antes de primera hora del jueves llegue una última autorización del Inter para que se pueda entrenar. La presentación oficial se realizaría el martes.