Creer o reventar. Desde que Matías Kranevitter abandonó el equipo por la dura lesión, el rendimiento del elogiado River de Marcelo Gallardo cayó. El Colo es parte de la columna vertebral y se mueve como uno de los nervios neurálgicos del Millonario. Su salida resintió a todo el cuerpo del elenco de Gallardo, pero él prefiere quitarse del centro del protagonismo y apoyar a sus compañeros.
"Es casualidad que River no haya ganado desde que no juego. Hay muy buenos jugadores que tienen buenos rendimientos. El domingo tenemos un partido importante", sentenció el mediocampista de 21 años que en la 8ª fecha sufrió la fractura del quinto metatarsiano del pie derecho en el compromiso ante Independiente.
Su vuelta se pensaba para el próximo año, con la Copa Libertadores como gran anzuelo, pero el tucumano, ya con la operación atrás y dando los primeros pasos de la recuperación, confesó que si la situación va por los carriles normales podría aparecer a principios de diciembre. "Si todo va bien, lo que hablamos con el doctor es que en los primeros días de diciembre esté entrenando normalmente", avisó.
Sus lágrimas cuando sufrió la lesión no estaban sólo relacionadas con que se perdería el resto del campeonato, sino también a una pronta citación a la Selección. "Yo sabía los rumores pero no había tenido comunicación con nadie de la Selección. Quiero agradecer porque tuve comunicación con los doctores de la Selección que me llaman para ver cómo me estoy recuperando cada cuatro días. No sé si es porque Martino me tiene en seguimiento, pero me llaman para ver cómo voy evolucionando", indicó.
"Les mando un saludo grande a toda la gente de River. Quiero agradecer por el apoyo. Espero volver pronto a las canchas", agregó el tucumano.