Los problemas con la pista, el calor y el mal humor de algunos pilotos por el deterioro del circuito hicieron que la misma tenga de todo, ya que muchos pilotos al bajar de sus autos se quejaban del estado del asfalto y le atribuían su bajo rendimiento sobre el auto.
El que no tuvo excusas y pudo llevar adelante una gran clasificación fue Néstor Girolami, que peleo palmo a palmo ese primer puesto con Mariano Werner, pero también antes con Franco Vivian.
Su compañero de equipo Agustín Canapino también fue un hueso duro de roer, pero el piloto de Isla Verde pudo ser el mas rápido y marcar una nueva pole para el equipo Peugeot en el campeonato.