

REDACCIÓN ELONCE
La Fiesta Provincial del Ternero de Feliciano celebra su 51° edición con los fogones como protagonistas. Son espacios donde la comunidad se reúne a disfrutar de la gastronomía local y la calidez del encuentro.

La Fiesta Provincial del Ternero, un evento emblemático para la región, continúa celebrando con gran éxito su 51° edición en la localidad de Feliciano. Esta festividad, que honra una de las tradiciones más representativas de la cultura entrerriana, se consolidó como uno de los encuentros más esperados por los habitantes y turistas que se acercan cada año.
Uno de los elementos más destacados de la fiesta, y que sigue siendo el favorito de los asistentes, son los tradicionales fogones, espacios donde la comunidad se reúne a disfrutar de la gastronomía local y la calidez del encuentro.

“Los fogones son los espacios que más se disfrutan en la Fiesta Provincial del Ternero de Feliciano”, afirmaron los organizadores.
Este año, como en ediciones anteriores, los fogones son los protagonistas principales de la fiesta, ofreciendo no solo deliciosos platos típicos, sino también un ambiente de camaradería y celebración.
En estos espacios, los asistentes pueden disfrutar de un variado menú de comidas regionales, entre las que se destacan los cortes de carne y otras delicias locales que se sirven con la calidez de la gente de Feliciano.
La fiesta, que ha sido testigo del paso de los años, mantiene su esencia intacta, enfocada en resaltar las costumbres y tradiciones rurales de la provincia.

Un evento que trasciende generaciones
A lo largo de los años, la Fiesta Provincial del Ternero se ha convertido en un evento que atrae a miles de personas, no solo de la provincia de Entre Ríos, sino de todo el país.

En su 51° aniversario, la fiesta se ha visto reforzada por la participación activa de nuevas generaciones que se suman a la celebración, manteniendo viva la tradición mientras incorporan nuevas ideas y enfoques. Este equilibrio entre lo tradicional y lo contemporáneo es uno de los elementos que hace única a esta festividad.
Como siempre, los visitantes disfrutan de los fogones al aire libre, una propuesta gastronómica que representa no solo un festín para los sentidos, sino también un espacio de encuentro y convivencia.
Los fogones son lugares de alegría, donde las familias y amigos se reúnen alrededor del fuego para disfrutar de buena comida, música y conversación. La calidez de estos momentos se convierte en uno de los recuerdos más apreciados por quienes visitan Feliciano durante estos días de fiesta.

Un orgullo para la comunidad de Feliciano
La Fiesta Provincial del Ternero de Feliciano es, sin duda, uno de los mayores orgullos de la comunidad local, que trabaja arduamente cada año para que la fiesta se desarrolle de la mejor manera posible.
La participación de productores locales, artesanos y músicos de la región le da a la fiesta un sello auténtico, que la distingue de otros eventos similares. Este encuentro no solo se trata de un festejo popular, sino también de una muestra de la riqueza cultural y productiva de Feliciano y sus alrededores.
A medida que avanzan las actividades, la Fiesta Provincial del Ternero de Feliciano sigue creciendo en popularidad, reafirmando su rol como un pilar cultural para la provincia de Entre Ríos. A través de los fogones y otras actividades, la comunidad celebra su identidad, su historia y, por supuesto, su amor por la tradición.

La tradición de los fogones
Desde el quincho “Los Hermanos”, comentaron a Elonce que “estamos haciendo la salsa criolla para el cordero deshuesado. Tenemos uno con estaca y uno común. El cordero viene del campo, que es la tradición de San José de Feliciano”.
José Daniel Díaz, uno de los asadores indicó que “primero lo hicimos con un amigo, después yo me aparté con mi hijo y seguimos. La idea es seguir, los chicos van creciendo y lo mantienen. Para nosotros que somos de acá esto es lo mejor. Es todo una hermosura”.

Patricia, integrante de otro fogón, contó que “el fogón nació en el 2000. Es familiar, nosotros somos seis hermanos. Nuestros hijos invitan a sus amigos, nosotros a los nuestros, es un fogón abierto”.
Se refirió al cambio de lugar de la fiesta y comentó: “fueron muchos años en la plaza y quedó chico el espacio. Hoy la gente que se resistía está contenta porque ve que se necesitaba un nuevo lugar”.

Un joven, hijo del dueño de otro fogón, explicó que “somos 21 primos, nos encargamos de todo nosotros. Nuestros papás y tíos están, pero nosotros seguimos la tradición. Hoy tenemos una manta de 37 kilos y otra más chica”.
El asador dijo que “el costillar es del vecino, porque cuando es ajeno es más rico. Mañana a la tarde nos toca hacer el que tiene cuero, el único inconveniente sería la lluvia si llega, pero algo vamos a hacer. La fiesta es muy linda, el cambio de predio fue bueno, llamó a mucha gente, se cambió la modalidad del movimiento, hubo más trabajo para todos. Salimos de la plaza que parecía más chica. Ahora vino mucha gente con sillones y demás. La cartelera de este año es muy buena también. La zona acompaña, todos vienen”. Elonce.com


