El pasado diciembre, el gobierno nacional impulsó cambios en la Ley Nº 27.64 de Promoción de la Alimentación Saludable, conocida como "Ley de Etiquetado Frontal". Estas modificaciones, publicadas mediante la disposición 11362/2024 en el Boletín Oficial, introdujeron un nuevo criterio para los sellos de advertencia en los envases de alimentos.
El principal ajuste establece que los rótulos negros solo advertirán sobre ingredientes añadidos durante la producción, como azúcares, grasas y sodio, excluyendo los nutrientes naturales propios de los alimentos.
Este cambio se reflejará en góndolas entre fines de febrero y principios de abril de 2025, tras un período de adecuación por parte de las empresas.
Alimentos que perderán sellos
Entre los productos que ya no llevarán ciertos sellos de advertencia, destacan:
- Quesos: Mantendrán únicamente el sello por exceso de sodio.
- Yogures: Dejarán de advertir sobre sodio y podrán destacar nutrientes adicionados como calcio.
- Mermeladas: No indicarán exceso de azúcares, considerando el azúcar inherente a la fruta.
- Aceitunas: Sólo conservarán el sello de sodio, al considerarse naturales las grasas del alimento.
- Jugos de frutas: Perderán el sello si el azúcar añadido es para conservación.
- Jamón: Si no contiene grasa añadida, solo advertirán el exceso de sodio.
- Barritas de frutos secos: Sin aceites o grasas añadidas, dejarán de portar sellos.
Críticas a las modificaciones
La Ley de Etiquetado Frontal, sancionada en 2021, buscaba brindar mayor transparencia a los consumidores, regular el marketing de productos no saludables y proteger la salud en entornos escolares. Sin embargo, expertos como Leila Guarnieri, nutricionista de FIC Argentina, consideran que estas modificaciones representan un retroceso.
“Se están flexibilizando las estrategias de marketing y reduciendo la información que reciben los consumidores”, señaló Guarnieri a RealPolitik. Según la especialista, los cambios carecen de respaldo científico y no fueron debatidos por expertos, lo que desvirtúa el objetivo inicial de la ley: proteger la salud y los derechos de los consumidores.
Impacto en el mercado
Las modificaciones han sido interpretadas como una prioridad hacia las ventas y estrategias de marketing de las empresas, por encima del bienestar de los argentinos. El debate continúa en torno a cómo estas medidas afectarán las políticas alimentarias en el país.
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