La temporada festiva está llena de momentos especiales: reuniones familiares, cenas opulentas, postres irresistibles y brindis interminables. Sin embargo, todos estos excesos alimenticios pueden traer consigo malestares digestivos y, en algunos casos, una sensación de culpa por haber comido de más. En este contexto, muchas personas recurren a dietas restrictivas o “detox” con la esperanza de “limpiar” su organismo después de las fiestas. Pero, ¿es realmente necesario? ¿Cómo llevar a cabo un proceso de depuración sin caer en extremos?
Hidratación
La licenciada en Nutrición Daniela Ramírez, explicó que uno de los pilares fundamentales para recuperarse de los excesos festivos es la hidratación. “Es fundamental mantenerse hidratado a lo largo del día, algo que debe ser un hábito continuo. En general, se recomienda consumir alrededor de dos litros de agua, aunque la cantidad puede variar dependiendo del clima, el nivel de actividad y otros factores”, aseguró la nutricionista a Elonce.
Ramírez agregó que, para una hidratación óptima, no solo basta con beber agua: “El agua sola no es suficiente para hidratar el cuerpo adecuadamente. Necesitamos electrolitos, como sodio, potasio y magnesio, que podemos obtener de diversas fuentes. Una opción interesante es añadir sal marina al agua para proporcionar estos electrolitos”.
Alimentación variada
Otro aspecto para una recuperación efectiva es mantener una dieta equilibrada y variada. Ramírez enfatizó la importancia de incorporar alimentos ricos en nutrientes esenciales. “Es fundamental incluir lácteos, huevos, quesos y carnes en nuestra alimentación, ya que estos alimentos aportan variedad de minerales y vitaminas que el cuerpo necesita”, explicó.
Además, mencionó que muchos de estos nutrientes se pierden debido a la industrialización y la degradación de los minerales en los suelos. “Es recomendable complementar la dieta con suplementos si se detecta una deficiencia nutricional, siempre bajo la orientación de un especialista”, indicó.
Reposo intestinal: tiempo para reparar el cuerpo
Un componente importante para la regeneración post-fiestas es el descanso intestinal. La licenciada destacó que el intestino necesita tiempo para reparar y eliminar lo que no es necesario. “El reposo intestinal no tiene que ser excesivo. Solo es necesario adelantar la cena y dejar un intervalo de al menos cuatro horas antes de irse a dormir. Este pequeño ajuste puede ayudar al cuerpo a realizar procesos de reparación celular”, explicó.
Alimentación antiinflamatoria
Para que los beneficios del détox perduren en el tiempo, es crucial modificar los hábitos alimenticios a largo plazo, según Ramírez. “No es recomendable hacer dietas estrictas que luego no se puedan sostener. La clave es adoptar una alimentación antiinflamatoria y natural”, destacó.
En este sentido, la nutricionista aconsejó evitar ciertos alimentos y bebidas. “Hay tres grandes grupos que deberían eliminarse o reducirse significativamente: aceites vegetales, azúcares refinados e hidratos de carbono, y alimentos procesados. Los alimentos procesados, en particular, siempre vienen empaquetados, con etiquetas llenas de ingredientes artificiales y químicos nocivos”, señaló.
La licenciada también mencionó algunas alternativas para acompañar el proceso de depuración. En lugar de recurrir a bebidas artificiales, sugirió optar por jugos naturales y el mencionó que para el tereré “si se le añaden hierbas como jengibre, cúrcuma o jugo de limón. Estos ingredientes ayudan a activar los procesos de eliminación del cuerpo”.
Asimismo, hizo hincapié en la importancia de reducir el consumo de alcohol. “El alcohol es tóxico para el organismo, por lo que es recomendable evitarlo mientras el cuerpo está en proceso de recuperación. Agua con sal o limón puede ser una opción excelente para depurar”, agregó.
Ayuno intermitente
Finalmente, Ramírez habló sobre el ayuno intermitente, una práctica cada vez más popular. “El ayuno intermitente puede ser una herramienta útil, pero debe ser combinado con una dieta adecuada. Para lograr buenos resultados, es necesario eliminar ciertos alimentos procesados, como los que contienen harina o azúcares refinados. La clave es empezar a consumir ‘comida real’, es decir, alimentos frescos y naturales”, destacó.
En cuanto a la saciedad, la licenciada mencionó que “cuando una comida está compuesta por proteínas y grasas saludables, el ayuno se vuelve mucho más fácil, ya que el cuerpo se siente lleno por más tiempo”.
El ejercicio y la transpiración
Ramírez también recomendó hacer ejercicio después de un período de excesos alimenticios. “El ejercicio físico es muy beneficioso para ayudar al cuerpo a deshacerse de los desechos y acelerar el proceso de depuración. Además, la transpiración es una excelente manera de eliminar toxinas”, concluyó.