Por primera vez en la historia, la FIFA aprobó la candidatura de 6 naciones para un mismo mundial. En el año 2030, se disputará una copa del mundo diferente a las anteriores, que solían jugarse bien en un solo país, o bien en grupos de países pertenecientes al mismo continente. En esta ocasión, las sedes abarcarán tres continentes: América del Sur, África y Europa.
Esta decisión fue tomada al mismo tiempo que se confirma que la siguiente copa del mundo se volvería a disputar en una única nación, en este caso, Arabia Saudita, decisión que fue recibida entre aplausos pero que despertó la preocupación de defensores de los derechos humanos, un tema candente en los países del Medio Oriente, incluido el seleccionado. Sin dudas será un comienzo de década interesante cuanto menos, y un reto logístico bastante importante, también será un reto para los pronósticos de apuestas deportivas, al tratarse de regiones geográficas muy distintas, muchas horas de traslados y vuelos, además de la logística televisiva, todo para dar un espectáculo que seguro dará mucho de que hablar en su día.
Sedes en diferentes continentes
Se trata de una decisión histórica, pero también un reto importante, principalmente para las selecciones participantes, quienes deberán trasladarse dependiendo de las decisiones tomadas por la FIFA y sus respectivas asociaciones. Implican muchas horas de vuelos además de adaptación a los husos horarios y a la climatología (se estima que algunos partidos se jugarán a 50° C), que se presenta diametralmente distinta en cada una de las regiones anfitrionas.
Por supuesto, esto también resaltará las diferencias culturales y en materia de recursos para cada una de las naciones anfitrionas, lo cual podría generar críticas fuertes tanto a la FIFA como a cada uno de los países anfitriones. Es una tarea titánica que requiere un esfuerzo igual de grande y una enorme cantidad de dinero. En total, en el mundial de 2030 se disputarán 102 partidos repartidos entre cada una de las sedes.
Arabia Saudita: la polémica está servida
Otra de las noticias que se dieron a conocer, es la sede del mundial del año 2034, es decir, el siguiente luego del de los 6 países. Esto despertó inmediatamente la polémica, ya que, mientras que en la FIFA la decisión se celebró con una lluvia de aplausos, los grupos defensores de los derechos humanos levantaron una ceja. Una de las principales razones es que Arabia Saudita es conocido por su poca preocupación por los trabajadores de la construcción, en su mayoría migrantes, quienes podrían morir en masa durante los preparativos del susodicho mundial.
Por otro lado, la falta de derechos y garantías para las mujeres en Arabia Saudita, además de su trato a los homosexuales además de la discriminación a grupos cristianos y minorías étnicas son motivos candentes en dicho país, que hasta ahora se ha negado en avanzar en estos temas. Sin embargo, los organizadores, además de las autoridades sauditas, ven la decisión como una oportunidad para avanzar en estas cuestiones, cosa que no convence del todo a dichos grupos defensores de los derechos humanos en el mundo.