REDACCIÓN ELONCE
Empleados de las oficinas de ARCA (ex AFIP) en Paraná desarrollan asambleas, sin atención al público de 8 a 10, durante este martes y miércoles. “Es un apagón informático en todas las oficinas del país a raíz de que la semana pasada, después de reuniones con la patronal, de forma extorsiva, nos pidieron que bajemos una cautelar por la plena estabilidad laboral de todos los compañeros por convenio colectivo; y no ofrecen ningún aumento salarial acorde a la inflación, que es lo que se está pidiendo”, comunicó a Elonce el secretario general de la seccional Paraná de la Asociación de Empleados Fiscales e Ingresos Públicos (AEFIP), Darío Marengo.
A través de un plenario de secretarios generales de AEFIP, previsto para el jueves 27, se definirá un plan de lucha en caso que “la patronal no brinde expectativas ni resultados por el tema salarial y el cierre de las oficinas del distrito, como ocurre en Concepción del Uruguay y en Gualeguay, que afectaría a 20 personas y otras 10, respectivamente”.
“Debido a la cautelar, las fuentes laborales estarían garantizadas; pero el problema es que esta medida intempestiva que la patronal sacó de un día para el otro les da 40 días para que se muevan más de 400 personas de los 38 distritos, de los cuales, 21 cierran definitivamente y los trabajadores deberán trasladarse kilómetros para trabajar”, expuso Marengo. Y denunció: “Se está violando la estabilidad laboral, contemplada en el convenio colectivo; y es una forma más de extorsionar y destruir el organismo”.
“No vemos ningún asidero en los considerandos de la disposición del cierre de 38 distritos en todo el país, cuando hablan de eficacia, transparencia y economicidad de costos porque, por el contrario, será un perjuicio para los trabajadores de esas oficinas y para la ciudadanía porque los contribuyentes deberán trasladarse los de Gualeguay a Gualeguaychú y los de Concepción del Uruguay a Concordia”, expuso el dirigente gremial.
“Es un perjuicio y una destrucción del organismo”
En la oportunidad, Marengo denunció “el congelamiento salarial y la reducción arbitraria del fondo de jerarquización, que es parte de la remuneración habitual y permanente, que es en base a la recaudación y cuyo porcentaje ya fue bajado en dos oportunidades”.
En relación a las condiciones salariales de los empleados, repasó que “de forma compulsiva, hubo un retiro voluntario a través del que se fueron más de 800 trabajadores en todo el país”; y acusó, además, “la imposición del impuesto a las ganancias que, afecta a la mayoría de los trabajadores”.
“La preocupación fundamental es por la incertidumbre y la desidia de la patronal al tomar decisiones inconsultas y siempre en contra de los trabajadores; hay un estado de zozobra porque no hay ningún beneficio para el ARCA ni sus empleados”, cuestionó el dirigente gremial.
