

La Justicia ya investiga el presunto intento de abuso sexual denunciado por el marido de una paciente de 34 años con una grave enfermedad en una sala de terapia intensiva del Hospital Rawson de la ciudad de Córdoba. A la par, el Ministerio de Salud provincial ya activó los protocolos para este tipo de casos.
La mujer no puede hablar, por su severo cuadro, y en un letra temblorosa le escribió a su pareja, de 41 años: “Esta noche me va a violar”.
En el parte policial se había consignado, erróneamente, que la mujer le escribió en un papel que un enfermero del turno de la noche abusaba sexualmente de ella.
Es importante este detalle porque el abuso no se habría consumado y no se identificó como el posible agresor a ningún integrante del equipo de salud.
La directora del hospital Rawson de la ciudad de Córdoba, Claudia Toledo, dispuso la custodia 24 horas de la sala donde está internada la mujer, permitió el acompañamiento permanente de un familiar -en un sector restringido a las visitas, por la gravedad de los cuadros que allí se tratan-, y remitió al área de Legales del Ministerio de Salud el informe que ya se le requirió sobre el personal de turno en el momento en que según la denuncia ocurrieron los hechos.

Como ya quedó aclarado, no se trata, como se informó inicialmente, de una denuncia con un autor individualizado. En el sector donde está internada la mujer no sólo ingresan enfermeros, sino también médicos y otros profesionales y personal de limpieza.
El caso está siendo investigado por la fiscal Ingrid Vago, quien dispuso que médicos y peritos de Policía Judicial vayan al Rawson, para cumplir una serie de directivas. También interviene la División de Protección de las Personas de la Dirección General de Inteligencia Criminal de la Policía. La principal de estas medidas periciales es la revisación médica de la presunta víctima, para discernir un aspecto clave: si hay signos de que el hecho que habría advertido con su nota a su marido se consumó o no.
Si bien no hubo hasta ahora información oficial, ni de la Justicia provincial ni de las autoridades del centro de salud, La Voz pudo conocer que la mujer que es la presunta víctima del abuso está internada hace 48 días en el hospital y padece un cuadro muy severo de lupus agravado por una infección de encefalitis de San Luis, una enfermedad vírica transmitida por mosquitos, que produce la inflamación del cerebro.
La combinación de las patologías generó un cuadro crítico, con afectación neurosensitiva, tanto por la propia sintomatología como por los fármacos que se le suministran en el tratamiento. Esto complejiza mucho más la investigación del caso, admiten en la Justicia.
Según explicaron fuentes del centro de salud provincial, si bien la mujer tiene una evolución favorable de su cuadro, a menudo no está en condiciones de discernir ni de armar un relato coherente por efecto del cuadro y de la medicación indicada.
Si bien no es una enfermedad infecto contagiosa, está internada en una sala de terapia intensiva, ubicada en el primer piso del Rawson por la complejidad de su cuadro, que exige aislamiento y monitoreo 24 horas y que puede tener momentos de pérdida de conexión con la realidad. (la Voz del Interior)