La Justicia rechazó la solicitud de exención de prisión presentada por Brian Nahuel Paiz, uno de los acusados por el presunto abandono seguido de muerte del cantante británico Liam Payne, ex integrante de la banda One Direction.
El trágico hecho ocurrió el 16 de octubre, cuando el músico de 31 años falleció tras caer desde el tercer piso del Hotel Casa Sur, ubicado en el barrio porteño de Palermo.
La decisión fue tomada por la Sala Cuarta de la Cámara Criminal y Correccional, que consideró que las pruebas presentadas en su contra justificaban la continuidad de su detención.
Paiz, un joven mozo de 28 años, está acusado de haberle suministrado cocaína a Payne, lo que presuntamente contribuyó a su muerte. La jueza Laura Bruniard había inicialmente dictado una resolución que favorecía al acusado, permitiéndole quedar en libertad bajo ciertas condiciones. Sin embargo, el fiscal Andrés Mandrea apeló esa decisión, argumentando que Paiz debía ser imputado con el mismo rigor que otros acusados en el caso, como Rogelio Nores y Ezequiel Pereyra, quienes también están bajo investigación por su presunta implicación en el incidente.
El fallo judicial y la apelación del fiscal
La Sala Cuarta, conformada por los jueces Ignacio Rodríguez Varela y Hernán López, consideró que existían suficientes elementos para mantener a Paiz en prisión preventiva. En su resolución, los magistrados detallaron que "se le endilga a Paiz haberle facilitado estupefacientes al menos en dos oportunidades a Liam James Payne durante su estadía en el Hotel Casa Sur de esta ciudad, que se inició el 14 de octubre último". Además, se destacó que el acusado había "mudado su domicilio apenas iniciada la investigación", un gesto que, según los jueces, no favoreció su situación.
La defensa de Paiz había argumentado que su cliente no debía enfrentar prisión preventiva, ya que consideraba que no existían pruebas suficientes para justificarla. Sin embargo, la apelación presentada por el fiscal Mandrea refuerza la acusación de que el mozo fue responsable de facilitar drogas al cantante, lo que desencadenó una cadena de eventos fatales que llevaron a la muerte de Payne.
Por otro lado, la jueza Bruniard se declaró incompetente para seguir adelante con el caso, argumentando que la calificación legal de "abandono seguido de muerte" no correspondía al fuero de instrucción, sino que debía ser tramitada en el ámbito contravencional porteño.
La última noche de Payne y los hallazgos forenses
Según fuentes cercanas a la investigación, Liam Payne pasó sus últimas horas de vida en el Hotel Casa Sur, donde bebió champagne en compañía de varias mujeres provenientes de las localidades bonaerenses de El Talar e Isidro Casanova. Estas mujeres fueron citadas a la habitación del cantante, con quienes luego mantuvo relaciones sexuales. Posteriormente, se desató un pequeño escándalo en el lobby del hotel, cuando Payne se negó a pagarles a las chicas por los servicios prestados, lo que habría alterado aún más el estado de ánimo del artista.
Las pruebas forenses fueron determinantes para comprender las causas de la muerte del músico. Los peritos toxicológicos detectaron la presencia de cocaína en su organismo, tanto en su sangre como en su orina, su contenido gástrico y en sus fosas nasales. Además, se halló la sustancia sertralina, un potente antidepresivo que se comercializa en Estados Unidos bajo la marca Zoloft. Este hallazgo sugiere que Payne podría haber estado tomando el medicamento para tratar algún trastorno depresivo, lo que añade un nuevo factor a la complejidad del caso. (Con información de NA)