La Justicia avanza en la investigación de la presunta estafa a decenas de personas en Paraná, que depositaron fondos no declarados en la denominada “Mesa de dinero” constituida en una financiera, la cual pagaba intereses superiores a los del mercado financiero, a los ciudadanos que consignaban fondos para obtener el beneficio económico.
Los responsables de la mesa de dinero tomaban pesos, dólares, vehículos y propiedades. A cambio, ofrecían rendimientos mensuales que rondaban el 4% en dólares y la devolución del capital al final del plazo. Esto implicaba que quien invertía 10 mil dólares en un año ganaba 4.800. La maniobra habría afectado a varias decenas de personas en por un monto que aún no fue precisado, pero que estiman, sería multimillonario.
Avance de la investigación
El fiscal Santiago Alfieri se refirió a la investigación que lleva adelante por asociación ilícita y estafas con tres imputados del ambiente empresario de Paraná. El agente del Ministerio Público Fiscal (MPF), sostuvo que se imputó a otra persona y afirmó que sumaron nuevas denuncias.
En referencia a los avances en la investigación, afirmó que se está “profundizando caso por caso, viendo si cada caso, reúne los componentes del delito o no, y ahora, atendiendo también, la pulseada entre las partes respecto de las medidas cautelares que ya están trabadas: modificación de secuestros y liberación de cuentas bancarias de algunas empresas que fueron vinculadas por transferencias, pero no con las maniobras delictivas”, explicó el fiscal.
Ya son 44 denuncias
Asimismo, Alfieri indicó que “hasta el momento hay unas 44 denuncias” y que la cifra de dinero denunciado, por no haber sido devuelto, “es cambiante, tenemos una cuenta con intereses y otra sin intereses. Además, sobre el final, ingresó una última denuncia que engrosaba bastante el monto, pero era un error de quien escribió esa denuncia. Es algo así como alrededor de los 500.000 dólares y otro tanto en pesos”, informó al dialogar con Análisis.
Respecto de la situación de los acusados, explicitó que “hemos tenido que intimar el hecho bastante genérico, al señor (Matías) Santa María, en función de que tenía otra situación accesoria que era el riesgo de fuga evidenciado, por lo que teníamos que gestionar con alguna medida de coerción y eso, reclama que esté intimado del hecho. Por eso, se le realizó la formulación de cargos a él. En lo que respecta a las otras personas vinculadas, es la investigación la que nos irá llevando a saber si hay mérito o no para vincularlas”, anticipó Alfieri.
Otro imputado
Al ser consultado por la posibilidad de que existan más personas imputadas, el fiscal mencionó: “Formulamos una modificación del decreto de apertura de causa atendiendo a lo que consideramos de carácter delictivo en términos penales, y no en aquellas transacciones económicas que están garantizadas o reforzadas en el cobro con los pagarés que emitían”, dijo Alfieri.
Al respecto, amplió que “se terminó incluyendo a otra persona más, que es quien fue atendiendo (desde mayo o junio) a las personas que hicieron inversiones para prorrogar y conservar ese capital o lograr nuevos capitales. Esto es lo que estamos investigando y eso, generó que se agregue a otra persona más en la investigación”, remarcó.
Cuentas congeladas
Santa María, Gamarci y Vital se encuentran con sus cuentas bancarias congeladas. Luego que se precipitaran las primeras denuncias, el fiscal pidió y la Justicia autorizó el que se oficie al Banco Central a inhibir las cuentas de las entidades financieras donde los acusados tengan cuentas: Brubank (un banco virtual que depende del banco de Santa Cruz), Banco Entre Ríos, GPAT Compañía Financiera (de General Motors), Macro, BBVA (Francés) y Patagonia.
Asimismo, se inhibieron las cuentas personales y de las sociedades de los investigados. Es decir, el fiscal fue inmediatamente por el líquido para que los denunciados no pudieran tocar nada, ya que es de donde se puede devolver algo a los acreedores.
Luego fue por los bienes, tanto los propios de los acusados como en la búsqueda de los que entregaron los inversores.
También se solicitaron los movimientos de cada cuenta bancaria para observar los cruces de información y podrían surgir más vínculos y relaciones entre ellos y otras personas.