Los hermanos Raúl Miguel Ángel Miño y Luis Rafael Miño fueron acusados de matar a Miguel Ángel Segovia el 30 de agosto de 2022. El primero también reconoció que participó junto a una pareja en el también brutal ataque a contra Oscar Darío Romero, ocurrido en junio de 2019.
El juez del Tribunal de Juicio y Apelaciones de Paraná, Rafael Cotorruelo, resolvió este martes pasar a un cuarto intermedio para analizar el acuerdo de juicio abreviado presentados por los fiscales, Juan Ramírez Montrull y Clarisa Aiello, y los defensores públicos, Juan Carlín por Luis Rafael Miño, y Vanesa Zampedri por Raúl Miguel Ángel Miño. En el plazo que marca la ley, se conocerá la resolución.
Detuvieron a dos hermanos por el crimen de un hombre en el Volcadero
Tanto Luis como Raúl Miño, reconocieron los hechos que se les atribuyen y aceptaron las calificaciones legales y también las penas acordadas. Los dos fueron acusados de matar a Miguel Ángel Segovia el 30 de agosto de 2022 y Raúl también reconoció que participó junto a una pareja en el brutal ataque contra Oscar Darío Romero, ocurrido en junio de 2019.
Luis Rafael aceptó la pena de ocho años y seis meses de prisión por su participación en el crimen de Miguel Ángel Segovia; y su hermano, 20 años, por ambos homicidios. Esta última condena comprendió la unificación de la que venía cumpliendo de tres años de prisión que se le impuso el 1 de junio de 2023.
Los hermanos Miño, según trascendió en la audiencia realizada este martes, no saben leer ni escribir, trabajaban de cartoneros y desde hace dos años dejaron de consumir estupefacientes.
“Que cumpla los 20 años adentro”
Al término de la audiencia, Doralisa Luchessi, mamá de Oscar Darío Romero, dijo que no estaba muy conforme con la pena acordada. “La herejía que le hicieron (a su hijo) no es para darle 20 años, estaba conforme con que le dieran mucho más. Bueno, los va a cumplir adentro, lo que quiero es que no salga, que cumpla los 20 años adentro, sin salida, eso es lo que quiero”.
Reconoció que desde Fiscalía la informaron de los términos del acuerdo y añadió que su hijo “firmó los 20 años” en relación al consentimiento de la familia respecto del acuerdo.
Expresó que sufrió mucho con la muerte de su hijo. Recordó que “fue un crimen muy malo, agresivo, loa verdad es que no merecía hacer semejante cosa”. Añadió que los Miño eran vecinos suyos y que incluso iba a su casa y “cirujeaban” juntos.
Los crímenes
El hecho que se les imputó a ambos hermanos ocurrió el “el 30 de agosto de 2022, entre las 4 y las 5 aproximadamente, en la zona del Volcadero de Paraná, ubicado en calle Ameghino al final, de común acuerdo, procedieron a golpear con botellas de vidrio y con otros objetos contundentes, en reiteradas oportunidades, a Segovia en la zona de la cabeza y rostro provocándole una herida cortante frontal izquierda de tres centímetros, herida contusa en región frontal derecha con fractura de hueso frontal, múltiples heridas contusas en región temporoparietal derecha, herida contusa en arco superciliar izquierdo, herida contusas en puente nasal, herida contusas en pómulo derecho con fracturas de hueso malar, herida contusa en mejilla derecha, excoriación y equimosis en hombro derecho, herida en oreja derecha, herida en región mandibular derecha, herida en arco superciliar izquierdo, lesiones que le provocaron la muerte por traumatismo craneoencefálico con hematoma subdural y hemorragia subaracnoidea".
A Raúl Miguel Ángel se le imputó que el "16 de junio de 2019, desconociéndose la hora exacta, pero entre las 0 y las 17, Elisa Andrea Segovia, Roberto Carlos Pérez y Raúl Miguel Ángel Miño ingresaron a la vivienda sita en calle Cura Gil Obligado sin número de Paraná, donde, utilizando armas blancas, le dieron muerte a Oscar Darío Romero. Para producir su muerte, agredieron físicamente a la víctima hasta dejarla indefensa”. La acusación sostuvo que los tres atacantes, “aprovechando ese estado, y sin ningún riesgo para sí, le realizaron una herida cortante en el cuello que le produjo la muerte por Hemorragia masiva incompatible con la vida”.
En la audiencia los fiscales resaltaron la violencia con la que se perpetraron los ataques. Así, Ramírez Montrull señaló que Segovia, la noche del crimen, les indicó a sus agresores un lugar donde podían juntar cartones y les dio cigarrillos. Por cuestiones que no se develaron, los hermanos agredieron a Segovia con golpes de puño y con palos y botellas hasta causarle la muerte.
Por su parte, Aiello, señaló que la víctima recibió múltiples heridas cortantes y resaltó que la que le causó la muerte fue la que le ocasionó el corte del cuello cuando ya no tenía posibilidades de defenderse. (APF)